La operadora de la central nuclear suspende operación para limpiar el agua radiactiva
Domingo 19 de junio de 2011, p. 26
Viena, 18 de junio. Un informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) criticó la actuación de las autoridades japonesas tras el accidente de la central de Fukushima, el 11 de marzo pasado, luego del terremoto de 9 grados Richter y el posterior tsunami, por no haber puesto en marcha el protocolo que exige el organismo en caso de accidente nuclear.
Según el informe, que se hará público el próximo lunes, las autoridades japonesas deberían haber puesto en marcha la convención de asistencia prevista por la AIEA en caso de accidente nuclear, un protocolo que prevé la cooperación entre los estados y la agencia para organizar la ayuda, la seguridad y la comunicación cuando ocurre este tipo de accidentes.
La AIEA también reprochó a Tokio que tampoco adoptara el principio, como recomienda el organismo, de tener medidas de seguridad a diferentes niveles contra las amenazas exteriores.
Las normas de seguridad dictadas por la AIEA no son de obligado cumplimiento por parte de los estados miembros.
El informe de la agencia también criticó que las medidas contra tsunamis, reforzadas por Japón en 2002, nunca fueron evaluadas por los expertos de la AIEA.
En tanto, Tokio Electric Power Company (Tepco), operador de Fukushima, dijo este sábado que suspendió una operación para limpiar agua radiactiva apenas horas después de comenzada, cuando los niveles de radiación aumentaron más rápido de lo esperado.
La empresa señaló que un brusco aumento de la radiación en una parte del sistema previsto para absorber el cesio provocó la suspensión de la operación, cinco horas después de que comenzara.
Los equipos que trabajan en la planta creen que el aumento de la radiación podría estar relacionado con el lodo que fluye en la maquinaria destinada a absorber cesio, o a un error de control causado por las tuberías cercanas que llevan agua contaminada.
Tepco indicó que la reanudación es fundamental para ocuparse del agua altamente radiactiva. La operación de limpieza es uno de los muchos pasos para estabilizar los reactores.
Las autoridades han dicho que en la central nuclear están almacenadas unas 110 mil toneladas de agua radiactiva, el equivalente a 40 piscinas olímpicas.