Morelia, Mich., 18 de junio. Con anotación de su desequilibrante delantero Justalain Kounkou, y el apoyo del público, el equipo de Congo Sub-17 venció 1-0 a Holanda, campeón europeo de esa categoría, en el segundo partido del día realizado en el estadio Morelos.

Con el graderío ocupado casi a la mitad, tras el juego entre México y Corea del Norte, los aficionados decidieron inclinarse por el supuesto equipo más débil.

Luego de un infumable primer tiempo, donde Kounkou dio sólo chispazos de su calidad, y Holanda se aplicó más en la defensa, lo más sobresaliente resultó la alegría del público, ya con algunos litros de cerveza bebidos, que intercaló porras de ¡Congo, Congo! con gritos contra el portero Boy de Jong, de Holanda.

Aunque al final del primer tiempo y tras el empate sin goles, nadie se salvó de la rechifla. Enseguida, el estadio se vació aún más y para el complemento a los aficionados les costó trabajo hacer circular la ola.

En el complemento, el guardameta congoleño Chill Ngakosso se aplicó al atajar un peligroso disparo realizado por Anass Achahbar; segundos después llegó la respuesta letal de Justalain, quien se encarreró desde tres cuartos de cancha, encaró al portero y definió preciso, a la derecha, al minuto 52.

El festejo fue todo un baile que, al final, repitieron para la tribuna por los cuatro costados.

Ambos equipos hicieron sus tres relevos, pero Congo se mantuvo como el cuadro dominante, aun sin Justalain, quien salió de cambio tras recibir una fuerte patada de Daan Disveld, capitán holandés.

Congo, próximo rival de México, tejió excelentes jugadas, como en la que Kader Bidimbou centró desde la derecha, Justalain dejó pasar y por la izquierda remató Mavis Tchibota, ligeramente desviado.

De esta forma, Congo logró sus primeros tres puntos de la competencia.