Sólo 3 por ciento se obtiene de modo altruista, afirma la institución
Miércoles 15 de junio de 2011, p. 39
México no ha logrado fomentar la donación voluntaria de sangre. Apenas 3 por ciento de plasma se obtiene por esta vía y el resto es aportado por las personas cuando algún familiar o amigo lo requiere porque está hospitalizado, afirmó Julieta Rojo Medina, directora del Centro Nacional de Transfusión Sanguínea.
En la celebración del Día Mundial del Donante de Sangre, la funcionaria reconoció que aunque México cumple con la tasa de donación recomendada por la Organización Mundial de la Salud, de contar con 100 donadores por cada 100 mil habitantes, la parte altruista es mínima. De hecho, en la mitad de los estados de la República la reposición es menor a cinco por ciento y mucho más bajo en Oaxaca, Chiapas, Guerrero e Hidalgo.
Otras entidades, como Chihuahua, están en 28 por ciento; San Luis Potosí, 14; Quintana Roo y Nayarit, ocho, lo cual, de todas maneras, es motivo de alerta, porque la meta del sexenio es alcanzar 50 por ciento de la sangre por donación voluntaria.
Durante la ceremonia oficial también se hizo la presentación de la Campaña de Donación Voluntaria y Altruista de Sangre 2011. Rojo Medina indicó que entre las principales tareas del organismo a su cargo está la difusión de los requerimientos y beneficios de aportar un poco de sangre antes de que en los hospitales se solicite de manera obligatoria para reponer la que utilizan los pacientes.
Explicó que quienes más requieren transfusiones son las personas con alguna enfermedad oncohematológica que reciben quimioterapia y los niños con leucemia.
Comentó que durante 2010 alrededor de 3 millones acudieron a donar, pero sólo se pudieron utilizar un millón 700 mil unidades de sangre. Y es que el plasma se somete a diferentes pruebas clínicas para garantizar su seguridad.
Se descarta, entre otras, la presencia de infecciones virales, como VIH, hepatitis, sífilis y otros problemas de salud, entre ellos colesterol, lo que también beneficia al donador.
Pueden acudir a los centros de transfusión sanguínea en los estados y a los hospitales e institutos de salud las personas sanas, de 18 a 65 años de edad, que tengan un peso mínimo de 50 kilogramos. Por razones biológicas se acepta la donación de sangre de mujeres sólo cuatro veces al año, mientras los hombres lo pueden hacer hasta seis veces en el mismo periodo.
Algunos factores que impiden tomar sangre son: padecer alguna enfermedad, estar en algún tratamiento médico, sufrir caries dental, presentar tatuajes o perforaciones y, en el caso de las mujeres, estar embarazada, en periodo de lactancia o menstruación.