Con la finalidad de garantizar que la mitad de la población de la ciudad de México, cuyos ingresos son menores a cinco salarios mínimos, pueda tener acceso a materiales digitales de muy alta calidad a un precio muy bajo, y al mismo tiempo combatir la piratería, el Gobierno del Distrito Federal presentó el programa Quiscos Digitales.

Los ciudadanos no requerirán de computadora para bajar música, videos, audiolibros, tonos y demás contenidos digitales de manera legal en los quioscos que se instalarán a partir de julio en plazas comerciales del Centro Histórico de la ciudad de México.

Durante la presentación, realizada en el Museo Interactivo de Economía, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, explicó que desde hace cuatro años se dieron a la tarea de ver qué se podía hacer para que, de manera legal, quienes adquieren productos piratas, en buena medida explicado por el nivel de ingresos que se tiene, tuvieran acceso a videos, música y libros, y además proteger a quienes están creando la propiedad intelectual.

Para cualquier sociedad, y en cualquier economía, es vital proteger la propiedad intelectual, dijo.

Alejandra Moreno Toscano, autoridad del Centro Histórico y responsable del programa, detalló que el reto era cómo resolver el problema de que los jóvenes sin tarjeta de crédito y sin computadora tuvieran acceso legal a los contenidos culturales, que los creadores de esos contenidos recibieran el reconocimiento de su autoría y que la industria continuara financiando nuevos proyectos que fueran accesibles para todos.

Se hizo una serie de investigaciones y ubicamos en Brasil la iniciativa Crea tu mundo, la cual nos propusimos adaptarla a las condiciones de la ciudad de México, del Centro Histórico, señaló.

Mencionó que por medio del fideicomiso del Centro Histórico se adquirieron 25 quioscos, los cuales se instalarán en las plazas del comercio popular de Correo Mayor 22 y 36, Eje Central 16, Pino Suárez 22, 16 de Septiembre 11, Victoria 7 y Costa Rica 54.

Los quioscos digitales tendrán un inventario de 300 mil canciones, 15 mil videos musicales y 75 mil tonos de teléfono de disqueras que participan en el programa, como Sony, Emi, Universal, Warner y Discos Musart.

La venta se hará mediante una tarjeta prepagada y los contenidos se almacenan en teléfonos celulares, reproductores mp3, unidades de memoria USB y otros dispositivos.