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Adaptación de la compañía Por Amor al Arte en el Museo Universitario del Chopo

El Periquillo Sarniento, de Fernández de Lizardi, es el nini de su tiempo”
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Integrantes de la compañía teatral que dan vida a la obra creada durante la guerra de Independencia
 
Periódico La Jornada
Domingo 12 de junio de 2011, p. a10

“La historia de El Periquillo Sarniento, de José Joaquín Fernández de Lizardi, que ahora llevo al teatro, es totalmente actual, sobre todo en estos días de ninis, de jóvenes que desperdician sus vidas”, expresó la directora de esta puesta en escena y de la Compañía Por Amor al Arte, Magdalena Solórzano de Haro.

Se trata de una adaptación que será estrenada este domingo, en el Foro del Dinosaurio Juan José Gurrola del Museo Universitario del Chopo. “El Periquillo Sarniento está considerada la primera novela mexicana. Actúan jóvenes muy profesionales, como Omar Alejandro, Angie Pérez, Ericka Minassian, Luis Ángel y Gerardo Lizardi, para un total de siete actores que interpretan 48 personajes.”

La novela fue publicada por primera ocasión en 1816, durante la guerra de Independencia. Fernández de Lizardi publicó uno de los primeros periódicos del México insurgente, al cual tituló con el que después sería su seudónimo, El Pensador Mexicano. La imprenta fue clausurada por el gobierno virreinal, bajo la acusación de que estimulaba perniciosamente la imaginación de los lectores y podía causar otra rebelión en la Nueva España.

La novela es una obra satírica sobre un personaje pintoresco de origen popular, Pedro Sarmiento, quien tomará el alias de Periquillo Sarniento en sus aventuras y desventuras.

Magdalena Solórzano explicó que en esta obra se presenta el primer periodo de El Periquillo, hasta donde éste llega al último escaño de la sociedad. Abarca desde que nace hasta que tiene unos 40 años; “elegimos este periodo porque nuestra compañía tiene el fin de hacer teatro dirigido sobre todo a los jóvenes. El Periquillo Sarniento es el nini de aquel tiempo”, dice.

A pesar de que a aquel niño le dieron todo cuando era pequeño, la mamá tenía muchos aires de grandeza y quiso poner a su hijo en las mejores escuelas; le dio todo en la mano, pero eso no fue en beneficio del muchacho, sino todo lo contrario, porque jamás agradeció nada y se fue por el mal camino. Para mí, esta obra tiene que ver con la toma de decisiones, porque el personaje va optando a lo largo de su vida. Se equivoca una y otra vez. Le da pereza pensar, reflexionar, y prefiere pedirle consejo a los amigos.

En su momento, la novela fue censurada. Pero es actual porque hoy vemos en los chavos un desánimo, frustraciones, amarguras por la falta de valores, porque los papás ya no están con ellos; por la falta de amor, de cariño. Están apáticos, no quieren actuar, no quieren moverse.

Por esto, espera que asistan al teatro los padres con sus hijos, para que reflexionen sobre la importancia de tomar decisiones adecuadas y responsables. “Y que los papás recuerden que no es bueno darle todo a los hijos. Eso no garantiza nada. Lizardi me cae muy bien porque era un rebelde y se dio cuenta de que su pueblo no pensaba y estaba manejado por el clero, por las altas clases, por el gobierno. Le desesperaba que su pueblo no pensara. Era, nada más, El pensador mexicano.

“Yo leí esta obra hace muchos años y me ayudó mucho porque pertenecía a la clase de los ninis. Se me hizo un texto pesado, un mamotreto, aburrido, pero ahora el señor Lizardi me cayó muy bien. Esta puesta en escena es muy divertida y la montamos como una farsa. Le escribí un corrido a Pedro Sarmiento. Respetamos la época, los usos y costumbres. Quien vaya se va a divertir y le caerán varios veintes en algunas cosillas. No es moralina; son las cosas tal y como son. Para oír consejos ya está la casa y mejor uso el humor negro, sarcástico. El Perico tuvo fortuna, pero al final sólo un perro le llora en su tumba. Nada de que ‘pobrecito’, porque al final le echa la culpa a la santa madre, que por qué lo maleducó. Planteamos que todos tenemos libre albedrío y no se vale culpar a quienes están alrededor.”

A la fecha, la compañía Por Amor a Arte ha montado 16 obras, varias de ellas clásicas.

El precio boleto es de 80 pesos para público en general y 50 estudiantes y maestros con credencial. La pieza dura una hora con 15 minutos y su temporada será del 5 de mayo al 3 de julio el 19 de junio), los domingos, a las 13 horas.