Académicos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) se reunirán con el tercer visitador de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis Jiménez Bueno, para pedir que les explique la falta de claridad que ha mostrado el organismo ante las quejas que interpusieron por los actos de hostigamiento y discriminación de los que han sido objeto por parte de funcionarios de esa casa de estudios afines a la rectora, Esther Orozco Orozco.

La molestia de los profesores radica en que desde hace dos semanas la comisión se comprometió a hacer un pronunciamiento público por los presuntos actos de discriminación que padecen en la forma de comentarios homofóbicos y xenofóbicos que se han difundido entre la comunidad universitaria mediante Internet.

Incluso, la CDHDF envió a los quejosos el documento que supuestamente daría a conocer a la opinión pública y en el que hace un llamado a Orozco Orozco para que realice las acciones legales que estén a su alcance para garantizar que los peticionarios y toda la comunidad de la UACM no sean víctimas de violaciones en sus derechos a la integridad personal, la igualdad y la no discriminación, así como a la honra y dignidad.

Ante esta situación, los seis académicos afectados, quienes pidieron el anonimato, se reunirán este lunes con Jiménez Bueno para exigirle que la comisión se pronuncie ya públicamente por estos hechos, como se comprometió, ya que los actos de hostigamiento contra quienes se han manifestado en favor de la revocación de la rectora se han incrementado y extendido a otras personas: dos trabajadores administrativos y dos estudiantes, que también se inconformarán ante la comisión.

En el documento entregado a los profesores, el cual tiene el logotipo del organismo, se relata que el pasado 11 de abril se presentó la primera denuncia, por lo que de manera inmediata, la CDHDF promovió medidas precautorias a fin de que cesaran los actos u omisiones atribuibles a servidores públicos de la UACM que pudieran generar situaciones de discriminación, o bien, vulnerar los derechos de expresión, de difusión del pensamiento y de información del peticionario y de otras personas integrantes de la comunidad universitaria.

Pese a que las autoridades universitarias, como respuesta, manifestaron su compromiso con el respeto a las garantías individuales, la CDHDF recibió otras cinco quejas de distintos académicos por presuntos ataques a su honor, al ser señalados como quienes impiden trabajar a la rectoría, además de que han sido víctimas de comentarios homofóbicos y xenofóbicos que son difundidos mediante Facebook y Twitter.

El documento de la comisión concluye con un llamado al diálogo entre la rectoría y la comunidad universitaria con miras a resolver las diferencias de opinión o de otro tipo que puedan tener, en el marco del respeto a los derechos humanos, de la comunicación efectiva y del entendimiento mutuo.