Lamenta el rechazo de Francia y España a avanzar en el proceso de paz definitivo
verifiqueel alto al fuego general decretado en enero
Madrid y París deberían ser parte del comité de supervisión de desarme: Eusko Alkartasuna
Lunes 28 de marzo de 2011, p. 24
Madrid, 27 de marzo. La organización armada vasca ETA (Euskadi Ta Askatasuna: País Vasco y libertad, en euskera) manifestó hoy su disposición, por primera vez, a desarrollar un mecanismo de verificación informal
para garantizar la veracidad del alto al fuego general
decretado el pasado 10 de enero. Acusó al Ejecutivo español, del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, de irresponsable
por pretender cerrar la oportunidad abierta
para lograr la pacificación definitiva del histórico conflicto.
ETA emitió su segundo comunicado del año en un contexto de cambios políticos en el País Vasco, sobre todo en el entorno del separatismo radical y de la izquierda abertzale (nacionalista).
Sortu (nacer
en euskera), formación de la izquierda abertzale que rechazó la violencia de ETA, y a la que el Tribunal Supremo de España le negó su registro como partido; Eusko Alkartasuna (EA), y Alternatiba (escisión de Esker Batua) anunciaron ayer que integrarán una alianza de cara a los comicios del 22 de mayo.
ETA lamentó el rechazo de París y Madrid a avanzar en el proceso de paz, tras su declaración de enero pasado, en la que por primera vez se mostró dispuesta a garantizar una verificación del cese de la violencia. Según el grupo armado, ni Francia ni España quieren que la comunidad internacional verifique el alto al fuego general y permanente de ETA. No lo quie- ren porque, pese a la hipocresía y la intoxicación, quedaría acreditado, también en el plano internacional, que la única violencia existente hoy en Euskal Herria es la que generan los propios estados
.
Lo anterior, en alusión a los derechos políticos eliminados con las numerosas ilegalizaciones de formaciones políticas y organizaciones sociales, así como a las no pocas denuncias de torturas y vejaciones a los presos etarras.
ETA reiteró su disposición a una verificación informal
, que se haría a través de una comisión internacional
. Ratificó su apuesta por una solución negociada y dialogada al conflicto, e instó a las formaciones políticas y sociales vascas que aúnen fuerzas, adopten compromisos y den nuevos pasos por la libertad y contra la represión
.
Hizo una valoración del momento político que vive el País Vasco, pero sin citar el fallo del Tribunal Supremo que rechaza la legalización de Sortu. Una de las características principales del momento es la confrontación entre quienes queremos desarrollar el proceso democrático de cara a una solución definitiva del conflicto y aquellos que pretenden cerrar la oportunidad abierta.
El dirigente de la izquierda abertzale, Tasio Erkizia, elogió la madurez política
y el saber responder a la llamada del pueblo
por parte de ETA, mientras el secretario general de EA, Pello Urízar, coincidió en que Francia y España bloquean el proceso a pesar de que deberían ayudar y ser parte de la comisión de verificación de desarme
.
El derechista Partido Popular calificó el comunicado de ETA de distracción
, y llamó a las instituciones españolas a perseverar para desarticular todos los montajes de la banda y todas sus pretensiones, tanto las electorales, como las de cualquier otro tipo
.
Ni el gobierno vasco, presidido por el socialista Patxi López, ni el Ejecutivo español valoraron el comunicado de ETA, al insistir que del grupo armado sólo esperan el anuncio de su disolución definitiva
.