La Iniciativa México, segundo capítulo, idea de Televisa consentida por Televisión Azteca, propició dos interpretaciones en la Cámara de Diputados.

Mientras el presidente de la Comisión de Gobernación, el panista Javier Corral Jurado, consideró que la autocensura del duopolio televisivo es un factor de riesgo para el desarrollo democrático del país, su correligionaria Josefina Vázquez Mota, coordinadora de la bancada del PAN, felicitó la iniciativa, porque no pretende, bajo ninguna circunstancia, coartar la libertad de expresión, ni ningún propósito de censura, ni mucho menos de desinformación al ciudadano.

Por otra parte, el senador Pablo Gómez, del PRD, recordó que fue precisamente Televisa la que se prestó al montaje que realizó la Secretaría de Seguridad Pública federal sobre la detención de Florence Cazzes, lo que provocó serias repercusiones diplomáticas con el gobierno de Francia. A este hecho se suma el de las fotografías presentadas por las autoridades policiacas donde aparecen cadáveres de presuntos delincuentes a los que les fueron colocados encima joyas y dólares.

Ojalá que las televisoras, agregó Gómez, cumplan con ese compromiso, y advirtió que a la llamada Iniciativa México le faltó algo fundamental: que el gobierno federal se obligue a no hacer propaganda sobre la detención de capos del narcotráfico ni a realizar otros montajes, como los que acostumbra hacer el secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna.

En tanto, el senador Ramón Galindo, del PAN, expresó su deseo de que las televisoras superen su interés comercial y dejen de estar difundiendo con tal amplitud escenas que dejan la idea en la juventud de que es bueno ser narco, porque tienen grandes ingresos, propiedades y altísimo nivel de vida.

El ex alcalde de Ciudad Juárez deploró que hayan sido las mismas televisoras que encabezan esta iniciativa las que presentaron al narcotraficante apodado La Barbie como estrella de Hollywood, pese a que es un criminal sanguinario.

En Puebla, el ex senador priísta Manuel Bartlett Díaz calificó el acuerdo de mordaza que intenta ocultar el fracaso de la guerra contra el narcotráfico que aplica el presidente Felipe Calderón: Todo acuerdo que intente coartar de una manera abierta o velada la libertad de expresión, u orientar el trabajo periodístico, es una mordaza y no se debe permitir.

A su vez, el presidente del PT, Alberto Anaya, sostuvo que ese acuerdo refleja la intencionalidad de ocultar a la sociedad cómo se está desbordando el problema del crimen organizado. Lo que se pretende es minimizar el problema, porque (Felipe) Calderón piensa que va contra su administración; es una complicidad equivocada para ocultar a la población problemas graves.

Los coordinadores de PRI, PAN y PRD en la Cámara de Senadores, Manlio Fabio Beltrones, José González Morfín y Carlos Navarrete, respectivamente, calificaron de positivo el compromiso de los medios de comunicación de evitar que la información que difunden acerca de la violencia e inseguridad se convierta en apología del delito. A estos elogios se sumó el presidente de la mesa directiva en San Lázaro, el priísta Jorge Carlos Ramírez Marín.

Por su parte, en un comunicado fechado en la residencia oficial de Los Pinos, la Secretaría Técnica del Consejo de Seguridad Nacional se sumó al reconocimiento que hizo previamente el presidente Calderón, y expresó su compromiso de respetar los derechos de libertad de expresión y de acceso a la información.