La Asociación Nacional de Abogados Democráticos (ANAD) aseguró que la iniciativa de reformas a la Ley Federal del Trabajo, presentada por diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), representa un grave retroceso en los derechos laborales de los trabajadores. 

Una veintena de litigantes de esa agrupación, procedentes de varios estados del país, se reunieron este domingo en la ciudad de México para participar en una conferencia de prensa en la que fijaron su postura sobre el tema de la reforma laboral.

“Es evidente la confabulación del PRI y de los dirigentes de las centrales sindicales –como la CTM y la CROC– con el sector empresarial, para menoscabar legalmente derechos fundamentales como estabilidad en el empleo, salario remunerador, condiciones de trabajo dignas, seguridad social y la libertad sindical, a cambio de que no sean trastocados los intereses de dirigentes sindicales tradicionales, para que sigan manteniendo el control de los trabajadores y continúen usufructuando a los sindicatos como negocio”, dijo Manuel Fuentes Muñiz, presidente de la ANAD, al dar lectura a un comunicado avalado por los litigantes de todo el país.

Se trata de una reforma que toma como referencia las propuestas fundamentales contenidas en la iniciativa de reforma laboral del Partido Acción Nacional (PAN), del 18 de marzo de 2010. Es una copia mejorada en la afectación de los derechos individuales, con la ventaja empresarial que mantiene un modelo sindical que impide la participación de los trabajadores en la definición de las relaciones laborales.

Modernización de la ley

El pasado 10 de marzo, la bancada del PRI en la Cámara de Diputados presentó una iniciativa de reforma laboral que incluye nuevas formas de contratación y reconoce legalmente el llamado outsourcing o subcontratación.

También se recortan los juicios laborales para evitar grandes pagos de las empresas por salarios caídos y se privilegia la figura de la conciliación, para asegurar acuerdos entre las partes. Además, se introduce igualmente la obligatoriedad para las empresas de aplicar planes de capacitación, adiestramiento y productividad.

Según la bancada priísta, es una reforma que moderniza la legislación laboral, y que tiene, asegura, el consenso de los sectores productivos del país.

Sin embargo, para la ANAD la iniciativa del PRI, negociada con el PAN, tuvo como actores principales en su confección a empresarios que militan en ambos partidos; sería de consecuencias muy graves que se aprobara.