Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) reportó una pérdida neta de 790 millones de pesos y adeudos vencidos de 510 millones con Petróleos Mexicanos (Pemex) en el periodo enero-septiembre de 2010.

Además, en su reporte de estados financieros incorpora ya un monto extraordinario de mil 315 millones de pesos bajo el concepto de provisión para cuentas de cobro dudoso, que es justo el monto adeudado por las aerolíneas del grupo Mexicana de Aviación. Sin embargo, en el documento el organismo descentralizado no hace mención alguna a estos adeudos.

La pérdida neta en las operaciones de ASA se registró a pesar de que en este mismo periodo aumentaron las ventas de combustible y su costo por litro en 29 y 31 por ciento, respectivamente.

El pasivo total del organismo que se encarga de administrar una red de 18 aeropuertos gubernamentales –los menos rentables del país– y vender combustible a aeronaves en territorio nacional ascendió en los primeros nueve meses de 2010 a 6 mil 637 millones de pesos, de los cuales 66 por ciento corresponde al adeudo con Pemex-Refinación por 4 mil 400 pesos.

De acuerdo con el más reciente informe público del director general de ASA, Gilberto López Meyer, los 510 millones de pesos reportados como adeudos vencidos en enero-septiembre rebasan por 39 millones el total de la utilidad bruta obtenida por la venta del combustible en ese mismo periodo.

El monto de mil 315 millones de pesos como provisión para cuentas de cobro dudoso contrasta con los informes previos, cuando en el de enero-mayo de 2010 apenas se ubicó ese rubro en 3 millones de pesos, mientras en 2009 ni siquiera existía ese concepto.

Apenas hace unos días, López Meyer reconoció que las aerolíneas que han dejado de volar por problemas financieros adeudan al organismo descentralizado más de mil 700 millones de pesos, de los cuales la gran mayoría corresponde a Mexicana de Aviación y a sus filiales Click y Link, mientras que Aviacsa debía 270 millones de pesos cuando dejó de operar en agosto de 2009, y el resto diversas aerolíneas que han dejado de volar en lo que va del sexenio.

Durante los primeros nueve meses de 2010, ASA vendió 19 mil 22 millones de pesos en combustible para aeronave, de los cuales 471 millones fueron su utilidad de venta.

La pérdida neta de 790 millones de pesos representa una variación de -207 por ciento respecto al mismo periodo de 2009, cuando reportó utilidades por 739 millones.

Aun cuando todavía no se hacen públicos los resultados finales del año –hay un enorme desfase para publicar los más recientes–, se prevé que el resultado de 2010 será peor que en años anteriores.

El reporte señala que ASA obtuvo ingresos propios por mil 230 millones de pesos, pero que la falta de pago del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México ocasionó que se registraran ingresos inferiores en 107 millones. Al cierre de septiembre la terminal aérea registra un adeudo total de mil 54 millones de pesos, monto que considera adeudos desde diciembre de 2009.

Los malos números de ASA también se reportaron en las operaciones realizadas en sus 18 aeropuertos, así como en los pasajeros transportados. En el periodo señalado hubo 116 mil aterrizajes y despegues en sus terminales aéreas, y 1.2 millones de pasajeros, cifras que representaron una caída de 3 por ciento en cada rubro.