Tres trabajadores que barrían el quiosco del poblado Barreales, municipio de Guadalupe Distrito Bravos, en Valle de Juárez, fueron acribillados por varios sujetos en una jornada violenta que incluyó otros 16 homicidios en diferentes regiones de Chihuahua.

Los empleados municipales fueron atacados por hombres armados que descendieron de dos vehículos y los sorprendieron cuando tomaban un descanso para desayunar en la plaza principal de esa comunidad, distante 65 kilómetros de Ciudad Juárez.

La Fiscalía General del Estado informó que las víctimas fueron identificadas como David Lara Rodríguez, de 42 años de edad, y Gabriel Escobar Vázquez y Rodolfo Ramírez Díaz, ambos de 40, quienes prestaban el servicio de limpia en el camión 02 del ayuntamiento.

Los dos primeros son hermano y cuñado, respectivamente, del extinto presidente municipal de Guadalupe Distrito Bravos, Jesús Manuel Lara Rodríguez, ejecutado en junio de 2010.

Asimismo, la narcoviolencia en Chihuahua incluyó otras 16 muertes, cinco de ellas en dos enfrentamientos en el municipio de Parral, cuatro en Ciudad Juárez, tres en la capital, tres en la población serrana de Cusihuiriachi y uno en Bocoyna.

Balaceras, narcobloqueos y ataques en Nuevo León

Una serie de tiroteos entre grupos rivales de pistoleros, y de éstos contra fuerzas federales, narcobloqueos y ataques contra bases policiacas, se suscitaron la noche del martes en los municipios de Guadalupe, Benito Juárez y Apodaca, Nuevo León, con saldo de un muerto y un levantado.

En Guadalupe, elementos del Ejército se enfrentaron con tres jóvenes de aspecto pandilleril que con un camión de pasajeros cerraban una vialidad, aparentemente para impedir el arribo de más elementos castrenses; en ese hecho los militares dieron muerte a uno de ellos y los otros dos huyeron en una camioneta.

Por otro lado, un empleado de la Cervecería Cuauhtémoc acudió a la delegación Santa Cruz de la Cruz Verde de Guadalupe para ser atendido a causa de una herida de bala en la espalda, pero cuando personal médico lo revisaba fue levantado por un grupo armado. Horas después fue liberado, pues sus captores lo confundieron, según dijo el afectado.

En otro orden, presuntos criminales que se desplazaban en varios vehículos balearon y arrojaron una granada contra las instalaciones de la delegación norte de la policía de Ciudad Guadalupe, causando daños a la fachada del inmueble y a tres vehículos.

Además, autoridades médicas reportaron que continúa grave la niña Alejandra del Ángel, de ocho meses de edad, quien la noche del pasado martes recibió un balazo en la cabeza cuando pistoleros acribillaron a un hombre en el centro de Monterrey. La menor fue sometida a una operación quirúrgica para extraerle el proyectil. El gobierno estatal se comprometió a cubrir los gastos médicos.

En Guerrero, ante los recientes ataques a los módulos policiacos del municipio de Acapulco, los efectivos de la policía preventiva se encuentran en alerta roja, dijo el secretario de Seguridad Pública, Héctor Paulino Vargas.

Este miércoles, el puerto acapulqueño vivió una nueva oleada de violencia con cinco ejecuciones en distintos puntos de la localidad y el hallazgo de tres cadáveres en igual número de fosas clandestinas localizadas en la colonia 24 de Febrero.

Las autoridades policiacas de la entidad guerrerense reportaron otros tres crímenes en Atoyac, San Jerónimo y la cabecera municipal de Cruz Grande. En Ciudad Altamirano, elementos policiacos confiscaron un arsenal y dos camionetas en una casa abandonada.

Por lo que hace a San Luis Potosí, tres pistoleros murieron y uno fue detenido después de un enfrentamiento con policías federales, previa persecución que se desató cuando los agentes aseguraron una camioneta en la que había armas y granadas.

Por otro lado, el hampa cobró la vida de 18 personas más en Sinaloa, Nayarit, Michoacán, Sonora, Jalisco, Aguascalientes, Durango, Morelos y Baja California. En esta última entidad soldados descubrieron un narcotúnel.

En Tamaulipas, varios sujetos lanzaron un artefacto explosivo contra una tienda de abarrotes del primer cuadro de Ciudad Victoria; en ese hecho un menor de 15 años resultó herido. En la cabecera municipal de Nuevo Padilla hubo ausentismo escolar en los planteles de todos los niveles, ante versiones del arribo de comandos armados a la demarcación.

En Mazatlán, Sinaloa, apareció una pinta de color negro en una barda contigua al fraccionamiento Casa Blanca, en la que el grupo delictivo Gente Nueva (que opera para el cártel de Sinaloa) se atribuyó el atentado en el centro nocturno Antares, donde murieron seis jóvenes y otros 19 resultaron heridos. El inmueble fue clausurado.