Kabul, 6 de marzo. Al grito de Muerte a Estados Unidos, cientos de afganos protestaron hoy por los muertos provocados por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), lo que llevó al presidente Hamid Karzai a exigir a la alianza dejar de matar civiles y consideró insuficientes las disculpas presentadas por David Petraeus, comandante en jefe de la fuerza invasora.

Los manifestantes marcharon por el centro de Kabul, la capital, algunos con pancartas en las que había fotografías de niños cubiertos de sangre quienes perdieron la vida en ataques aéreos de las fuerzas extranjeras que combaten a la milicia del talibán.

La protesta se produjo cinco días después que nueve niños afganos murieron tiroteados por dos helicópteros de combate mientras recogían leña en la provincia oriental de Kunar.

El incidente provocó una inusual petición de disculpas públicas de los oficiales militares de Estados Unidos en Afganistán, donde combaten a los talibanes derrocados tras la invasión estadunidense, el 7 de octubre de 2001, en represalia por el cobijo que daban a Osama Bin Laden, autor intelectual de los atentados del 11 de septiembre de ese mismo año contra Nueva York y Washington.

Amplia participación de mujeres

Decenas de mujeres también estuvieron entre los manifestantes, circunstancia poco habitual en un país donde están vetadas en su mayor parte en la vida pública. Utilizando altavoces, algunas gritaban: No queremos estadunidenses, no queremos a los talibanes, queremos paz.

Las víctimas civiles causadas por las fuerzas afganas y lideradas por la OTAN en su lucha contra los insurgentes se han convertido en una gran fuente de fricción entre Karzai y sus aliados occidentales.

Karzai demandó en nombre del pueblo afgano que las fuerzas internacionales dejen de matar civiles, durante una reunión con sus asesores, a la que acudió Petraeus.

En el encuentro, el mandatario afgano declaró que las disculpas del general Petraeus no son suficientes, y subrayó que las víctimas civiles son la principal causa del deterioro de las relaciones entre Afganistán y Estados Unidos.

El militar estadunidense ofreció disculpas y afirmó que lo ocurrido en Kunar fue un gran error.

En las últimas dos semanas han ocurrido al menos cuatro incidentes con bajas civiles a manos de tropas extranjeras en el este de Afganistán donde, según oficiales afganos, habrían muerto más de 80 personas.

Las muertes de civiles en la nación invadida aumentaron 20 por ciento en los primeros 10 meses de 2010 en comparación con 2009, según cifras de la Organización de Naciones Unidas, que muestran que más de tres cuartas partes son causadas por los insurgentes.

En el más reciente ataque de los rebeldes talibanes, 12 civiles murieron cuando su vehículo pasó sobre una bomba en la provincia de Paktika, en el sureste del país.