Ante las críticas de legisladores por los manejos financieros del Instituto Federal Electoral (IFE), relacionados con el uso de 348 millones de pesos del presupuesto 2010 en este año, el consejero presidente del Instituto Federal Electoral, Leonardo Valdés, dijo que es bueno que los legisladores estén preocupados por ello, pero deberían ocuparse de la deuda que tienen con el sistema electoral. El Congreso –dijo– no ha designado desde noviembre pasado a los tres nuevos consejeros ni ha aprobado la ley reglamentaria del artículo 134 constitucional.

De forma previa a la sesión del Consejo General, Valdés ofreció una rueda de prensa donde justificó el uso de los ahorros del instituto para la adquisición de inmuebles, toda vez que se pretende abatir el elevado gasto que aplica el IFE al arrendamiento de oficinas, que anualmente asciende a 233 millones de pesos. Dijo que el organismo mantiene 574 inmuebles rentados en todo el país y se requiere lograr ahorros y en el futuro eliminar el pago de rentas.

Posteriormente, al arranque de la sesión del Consejo General, Valdés hizo un nuevo llamado, enérgico, al Congreso, para que designe ya a los nuevos consejeros, pues su incumplimiento ha afectado el funcionamiento del IFE. Ayer debió retrasarse, una vez más, la sesión, ante la falta de quórum.

Por otro lado, el contralor del organismo, Gregorio Guerrero, quien en su momento condenó la pretensión del IFE de ejercer los remanentes del presupuesto 2010 en este año, volvió a cuestionar esta decisión, y en consonancia con el discurso de los legisladores –que lo designaron en el cargo–, demandó sensibilidad al IFE en estos tiempos de crisis y devolver los recursos.

En la conferencia, subrayó que la Cámara de Diputados está al tanto de esta política, al punto de que para 2011 aprobó una partida de 173 millones de pesos para el fondo inmobiliario del IFE. Dicha partida estará orientada a comprar en algunos casos terrenos, en otros edificios y en algunos construcción de oficinas, aunque el monto no permitirá eliminar del todo el problema del arrendamiento de inmuebles para la institución.

A pregunta expresa sobre las críticas de legisladores por no devolver los recursos no ejercidos en 2010, Valdés señaló que están dispuestos a que la Auditoría Superior de la Federación inicie una auditoría para solventar el gasto. El ahorro aplicado a este fondo representa sólo 6 por ciento de los 5 mil 600 millones de pesos ejercidos en 2010.

Valdés arremetió contra los legisladores por su deuda con el sistema electoral, ya que a la falta en que han incurrido al no designar a los tres nuevos consejeros electorales que deberían haber tomado posesión hace tres meses, se añade el incumplimiento del Congreso a la aprobación de la ley reglamentaria al artículo 134 constitucional, reformado hace tres años.

Hace mucho que debía ser aprobada, dijo Valdés, pero a fin de cuentas es bienvenida la preocupación de los diputados, pero mejor venida será la ocupación que tienen en materia legislativa para completar el sistema electoral.