La senadora María de los Ángeles Moreno Uriegas, del PRI, lamentó que México –a diferencia de otros países– carezca de una política de Estado en materia alimentaria, que asegure el abasto nacional. Es prioritario que tanto el Congreso como el Ejecutivo federal, nos unamos en el propósito de establecer, en el corto y mediano plazos, una política sobre este capítulo.

Recordó que el Congreso cumplió con su responsabilidad de legislar en favor de más de 15 millones de obreros del país al aprobar la Ley de Ayuda Alimentaria para los Trabajadores, que tiene como fundamento la justicia social.

Con esa iniciativa que tuvo el apoyo del gobierno federal y del sector productivo, abundó, México se coloca a la vanguardia respecto de otras naciones que ya cuentan con programas de ayuda alimentaria para millones de personas asalariadas como Brasil, país que ha marcado un gran avance en la materia.

En un comunicado, la senadora priísta menciona que la ley asegura una alimentación sana y una nutrición correcta para los trabajadores, de acuerdo con su sexo, edad, lugar donde esté y labor que desarrollen. Se trata de una prestación que puede darse de varias maneras para hacerla accesible a cualquier tipo y tamaño de empresa.

Admite que habría un sacrificio fiscal para apoyar esta prestación a los trabajadores, en tanto que los patrones empleadores tendrían derecho a deducir, contra el impuesto sobre la renta o el IETU, lo que corresponda hasta un salario mínimo general, lo que les aliviaría la parte que corresponde a ese pago.