México se encuentra entre los diez países con mayor índice de accidentes viales que son la primera causa de muerte entre personas de 5 a 35 años de edad, así como el segundo motivo por el que las personas quedan discapacitadas o huérfanas, aseguró la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), luego de anunciar que durante el periodo vacacional de invierno aplicará alrededor de 100 mil exámenes a conductores de transporte público federal, a fin de asegurar que no conduzcan bajos los efectos del alcohol o drogas o padezcan alguna enfermedades que pongan en riesgo a los pasajeros y otros conductores.

A partir de este fin de semana la SCT puso en marcha el operativo 30 Delta, dedicado a los operadores de transporte público federal carretero, ferroviario y marítimo, así como el operativo Rampa para tripulaciones de servicios aéreos.

Los exámenes que aplicará personal de la Dirección general de Medicina del Transporte consistirán en una inspección general, interrogatorio intencionado, valoración de los signos vitales, reflejos osteotendinosos y oculares, así como detección de consumo de estimulantes o bebidas alcohólicas.

En el operativo 30 Delta participarán elementos de la Policía Federal, quienes coadyuvarán a que las pruebas médicas se apliquen a conductores en operación, con el propósito de evitar accidentes en las carreteras. Se estima que en menos de 10 minutos se realizarán los exámenes a cada conductor.

La SCT destacó que habrá tolerancia cero con quienes hayan consumido alguna bebida alcohólica o sustancia tóxica

Los resultados de todas las pruebas se almacenarán en una base de datos electrónica, información que servirá para que los operadores de cualquier modo de transporte federal puedan renovar su licencia.

Durante el periodo vacacional invierno 2009-2010 se practicaron 106 mil exámenes médicos en operación, 95.6 por ciento de ellos en autotransporte federal, 3.1 por ciento en aeropuertos, uno por ciento en terminales ferroviarias y el resto en puertos.

Del total, 211 personas resultaron con diagnóstico de no aptitud por lo que se solicitó a su empresa relevarlo de la responsabilidad de operar, conducir o auxiliar el transporte federal. Posteriormente, a este personal se le aplicó un nuevo examen integral, para valorar su estado.

Los principales diagnósticos de no aptitud fueron uso de sustancias prohibidas y consumo de alcohol en 58 por ciento de los casos; problemas de hipertensión en 20 por ciento; y diabetes mellitus en 18 por ciento de los examinados.