Una de las principales acciones emprendidas por el gobierno federal para ampliar la oferta de telefonía móvil de banda ancha sigue en el aire, atrapada por una serie de impugnaciones legales.

Hoy por hoy, la concesión otorgada a Nextel para ofrecer telefonía móvil de última generación no surte efecto jurídico ni material alguno, aseguró ayer Salvador Rocha Díaz, abogado de Iusacell, empresa de telefonía filial del Grupo Salinas que impugnó el proceso de realización y el resultado de la licitación 21.

En octubre pasado, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) entregó a un consorcio integrado por Nextel y Televisa (del que después la televisora se separó) la concesión para el uso de 30 megahercios (Mhz), como parte de la licitación 21 de espectro radioeléctrico. Esta porción de banda permite al usufructuario prestar servicios de telefonía móvil, datos e Internet.

Este miércoles, Fernando Gómez Mont, abogado de Nextel, declaró en Radio Fórmula que la concesión otorgada a esa empresa en octubre pasado sigue siendo perfectamente válida. El ex secretario de Gobernación añadió: Yo creo que se están tomando medidas en el Poder Judicial para evitar que esta táctica de dispersión y de guerra china que está intentando el grupo de Ricardo Salinas dé lugar a sentencias contradictorias. Las próximas semanas tenemos conocimiento de que se buscará que todos estos juicios sean analizados en un mismo espacio para evitar sentencias contradictorias.

Rocha Díaz declaró el viernes pasado que esta semana vence el plazo para que Juan Molinar Horcasitas, titular de Comunicaciones y Transportes, notifique por escrito a Nextel que no tiene efecto la concesión obtenida a través de la licitación 21, en cumplimiento a una resolución del juzgado 17 de distrito de Veracruz.

Este miércoles, Rocha Díaz dijo a este diario que la afirmación de Gómez Mont en el sentido de que la licitación y el título siguen surtiendo sus efectos, es una declaración de un abogado de parte, que contradice claramente la resolución de la juez 17 de distrito en Veracruz.

La juez dictó una resolución el primero de diciembre pasado en la que, de acuerdo con Rocha Díaz, determinó que el secretario de Comunicaciones y Transportes ha violado la suspensión sobre el proceso de entrega del título de concesión. Por tanto, el título entregado a Nextel a principio de octubre no surtía efecto alguno ni material ni legal.

Aseguró Rocha Díaz: el secretario de Comunicaciones no ha incurrido aún, según la resolución de la juez, en responsabilidad por el desacato a la suspensión.

Para el abogado de Iusacell, ésta es la verdad legal, independientemente de lo que digamos los abogados. Esta resolución de la juez puede ser: uno, cumplida por el titular de SCT a través de enviarle un oficio a Nextel haciéndole saber que el título que le fue entregado no surte efectos jurídicos ni materiales hasta que se resuelva el amparo; o bien, impugnar esa resolución a través de un recurso de queja. El señor Gomez Mont no nos dice qué va a hacer, simplemente nos dice que carece de efecto jurídico, pero su palabra, muy estimable, frente a la resolución judicial, no tiene ningún peso.

Rocha Díaz comentó que, de acuerdo con la información de que disponía hasta ayer por la tarde, la SCT o su titular no habían impugnado la resolución de la juez 17 de distrito de Veracruz. Aunque el plazo, añadió, vence hasta el jueves o viernes, según el día en que hayan sido notificados.

Rechazó que Iusacell o el Grupo Salinas estén haciendo un uso excesivo de los recursos ante tribunales (han presentado más de 70 impugnaciones y hay medio centenar de procesos en curso contra la licitación 21) en contra de la entrega del título de concesión a Nextel.

Nadie puede abusar de los medios de impugnación que el orden jurídico mexicano otorga a los particulares para oponerse a actos arbitrarios de la autoridad. Me parece excesivo que se considere abusivo.

Hasta este jueves, y después de un proceso que se ha prolongado por meses, para efectos prácticos la porción de espectro entregada por el gobierno federal a Nextel sigue en el aire.