Solventar la atención médica lleva a la pobreza a cien millones, dice
Martes 23 de noviembre de 2010, p. 43
Alrededor de mil millones de personas no pueden pagar ningún servicio de salud, y solventar la atención médica lleva a la pobreza a cien millones de personas por año, dijo ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En un informe global sobre sistemas de financiación de la atención sanitaria, la agencia de Naciones Unidas indicó que todos los países –ricos y pobres– podrían hacer más esfuerzos por llegar a la cobertura universal.
La OMS instó a las naciones a pensar en formas de aumentar la eficiencia y usar nuevos impuestos –y otras medidas innovadoras de recaudación y generación de fondos– para mejorar el acceso a la asistencia médica.
Para muchos, los servicios de salud no existen; para otros, no son asequibles. Cuando pasa esto último implica que uno debe elegir no usarlos o padecer penurias financieras graves
, dijo David Evans, director de financiación de sistemas de salud de la OMS.
El Informe mundial de salud 2010 señala medidas que los países podrían tomar para aumentar los fondos y reducir las barreras financieras para obtener cobertura médica y hacer más eficientes los servicios de salud.
El escrito indica que para evitar el empobrecimiento de las personas, los pagos directos de los servicios médicos por los pacientes deberían representar menos de 15 o 20 por ciento del total del gasto en salud de un país.
No obstante, en 33 países de bajos y medianos ingresos los pagos directos de los individuos que reciben asistencia aún representan más de 50 por ciento del total del gasto sanitario.
La directora general de la OMS, Margaret Chan, escribió con respecto al informe que nadie que requiere asistencia médica, ya sea curativa o preventiva, debería quedar en riesgo de ruina económica como resultado
.
La OMS indicó que entre 20 y 40 por ciento del gasto en salud se desperdicia con frecuencia por la compra de medicinas costosas pero innecesarias, la ineficiencia de los hospitales y el mal uso del tiempo de los profesionales entrenados.
Más de la mitad de los fármacos de todo el mundo son recetados, entregados o vendidos inadecuadamente, y la mitad de los pacientes no los toman como se les indicó.