Al recibir el premio Más México en Naciones Unidas, el gobernador de Chiapas, Juan Sabines, lo ofreció al pueblo de la entidad y dijo que se trata de una estafeta para que los habitantes de los municipios más marginados sigan avanzando en el desarrollo humano.

Este es el resultado de un trabajo de unidad con la Organización de Naciones Unidas (ONU), de entender y poner en marcha sus propuestas para erradicar la pobreza y el hambre, asentó tras recibir el premio de manos del coordinador residente del organismo en México, Magdy Martínez Solimán.

Sostuvo que dicho premio es un compromiso para continuar con los compromisos asumidos con la ONU dentro agenda firmada con el organismo internacional en mayo de 2008. Entonces se signaron tres convenios y actualmente suman 16, y por ello el enfoque del presupuesto del estado está orientado a combatir la pobreza. Se trata de un trabajo conjunto con una visión de Estado, que ha contado con el apoyo del presidente Felipe Calderón.

Acompañado por su esposa, Isabel Aguilera, el gobernador comentó que antes de asumir su cargo –en diciembre de 2006– había consultado un informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en el que se asentaba que México contaba con las condiciones óptimas para cumplir con los Objetivos del Milenio, pero había tres estados que no cubrían esa expectativa, entre ellos Chiapas. Parecía de uso y costumbre que el estado siempre ocupara el último lugar en desarrollo humano; pero ese informe no era una sentencia y me puse en contacto con Magdy Martínez, quien mostró con cifras lo lejos que estaba su población de alcanzar los Objetivos del Milenio.

De las palabras se pasó a los hechos, y ahora la población chiapaneca, sobre todo de los municipios más marginados, elevó su expectativa de vida; se duplicó el número de camas en los hospitales; se han intensificado las campañas de salud reproductiva con un enfoque para prevenir la muerte materna e infantil, y en este rubro ya se colocó en el octavo lugar.

El gobernador de Chiapas, Juan Sabines, recibe el premio. Lo entrega Magdy Martínez, representante de la ONU en MéxicoFoto Carlos Ramos Mamahua

Se impulsaron los programas Todos a la Escuela. Se elevó a rango constitucional el derecho a la identidad que beneficia incluso a los hijos de los migrantes guatemaltecos. En el estado se cuenta con una política de protección a los migrantes y combate a las bandas de trata de éstos. Se firmó un convenio con la ONU en caso de riesgo por desastres y con la Organización para la Agricultura y la Alimentación un programa especial de seguridad alimentaria. Se ha fortalecido la gestión en materia de agua y saneamiento. Y con el PNUD avanza en las acciones de equidad de género.

Hay avances pero siguen los retos, sostuvo en su discurso de agradecimiento por el premio. Explicó que la tercera parte del presupuesto del estado se canaliza a mejorar las condiciones de la población: se ha destinado 10 veces más para el desarrollo humano que el sexenio anterior; incluso se han dejado compromisos de campaña para cumplir con los Objetivos del Milenio.

Pero ello no se trata de un asunto sexenal o personal, sino de poner en acción las propuestas de la ONU, que son universales y representan certidumbre para los habitantes del estado. El rumbo está trazado, el premio es señal de que el camino que se tomó es certero. Reiteró: este reconocimiento lo dedico a quienes están por lograr el desarrollo anhelado.

La senadora Rosario Green también recibió dicho premio, en reconocimiento a su trayectoria y trabajo dedicado al multilateralismo, la paz y el desarrollo de los derechos humanos.