Los laboratorios farmacéuticos de capital nacional tienen que moverse y buscar alternativas de mercado en otros países, así como incursionar en la investigación para sobrevivir, advirtió Antonio López de Silanes, presidente del laboratorio Silanes.

Sólo de esa manera las empresas mexicanas podrán enfrentar las presiones de la globalización y el cambio de estrategia de las firmas trasnacionales que ahora hacen todo para resarcir en algo la disminución de sus ingresos por el término de sus patentes, señaló el empresario.

En conferencia de prensa para dar a conocer el lanzamiento de un medicamento, producto de la alianza entre Silanés y el laboratorio brasileño Aché, López de Silanes comentó sobre la necesidad de que el gobierno mexicano apoye a los fabricantes nacionales de medicamentos con mecanismos que les faciliten el camino para comercializar sus productos en otros países.

Por falta de acuerdos entre las autoridades sanitarias de México con las de otras naciones, las empresas deben cumplir con todos los trámites para la obtención de permisos para vender sus productos. Si existieran los convenios con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), como los que tiene la Administración de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) en varios lugares del mundo, sería más fácil la exportación, apuntó.

Recordó que hace algunos años inició una negociación entre Cofepris y FDA para establecer un acuerdo mediante el cual en México y Estados Unidos aplicarían las mismas reglas para el otorgamiento de registros sanitarios. Sin embargo, el proceso se abandonó y el lugar lo tomó Brasil.