Kabul, 18 de octubre. El líder de la red Al Qaeda, Osama Bin Laden, vive cómodamente en una casa en el noroeste de Pakistán, no muy lejos de su principal lugarteniente, el egipcio Ayman Zawahiri, de acuerdo con un alto funcionario de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) citado por la cadena de televisión CNN.

Nadie de Al Qaeda vive en una cueva, declaró el funcionario, quien pidió el anonimato, según CNN.

Bin Laden, buscado por los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra las Torres Gemelas, en Nueva York, y el Pentágono, en Washington, recibe protección de la población local y de algunos miembros de los servicios de inteligencia paquistaníes, indicó.

Osama Bin Laden vive en la clandestinidad desde hace nueve años, a raíz de la invasión militar de Estados Unidos en Afganistán que derrocó al régimen talibán que le daba cobijo y logró huir a la montañosa región afgana de Tora Bora.

El representante de la OTAN no explicó, sin embargo, de dónde proceden tales informaciones. Tampoco quedó clara la cuestión de por qué los militares –si realmente están tan informados– no atacan a Bin Laden y a su número dos con un avión estadunidense no tripulado.

Desde que Bin Laden se escondió, cada cierto tiempo emergen especulaciones según las cuales vive tranquilamente en Pakistán.

Sin embargo, el gobierno de Pakistán negó la información de CNN. Historias como éstas surgen continuamente. Nuestra reacción desde el primer momento es clara: él no está aquí. Siempre aseguran que Osama está aquí (en Pakistán), pero no dicen exactamente dónde. No creemos esas historias, declaró Samsam Bokhari, viceministro paquistaní de Información.

Si la OTAN y otros poseen información acerca de Bin Laden y su lugarteniente u otros terroristas, deberían compartirla con nosotros. Si obtenemos información creíble, procederemos contra él de acuerdo con las leyes paquistaníes, subrayó.

En una entrevista difundida en julio pasado por Fox News, Hillary Clinton, secretaria estadunidense de Estado, expresó sus sospechas de que algunos miembros del gobierno paquistaní conocen el paradero de Bin Laden en ese país.

La búsqueda del líder de Al Qaeda ha resultado ser para Estados Unidos una humillación, consideran algunos analistas. Su constante huida ha refutado hasta hoy las palabras del ex presidente George W. Bush: si cree que se puede esconder y huir de Estados Unidos y sus aliados, está muy equivocado.

A finales de 2004 el entonces presidente paquistaní Pervez Musharraf aseguró que se había perdido el rastro de Bin Laden.

El año pasado trascendió que en un encuentro de expertos estadunidenses en seguridad se habló de que su campaña antiterrorista centrada principalmente en vencer a Al Qaeda (y sobre todo capturar o matar a Bin Laden) no sólo se ha enfriado, sino se encuentra congelada.

Por otro lado, Gilles de Kerchove, el coordinador de la política antiterrorista de la Unión Europea, declaró que el riesgo de un ataque en Europa existe, pero no hay motivos para crear alarma tras las informaciones publicadas por medios anglosajones el pasado 29 de septiembre.

En ellos, los servicios de inteligencia occidentales descubrieron proyectos de atentados vinculados con Al Qaeda en grandes ciudades en Gran Bretaña, Francia y Alemania, del mismo tipo que los ataques de Bombay, que dejaron 166 muertos en 2008.