Presentaron ante 14 mil asistentes The Suburbs, su disco más reciente
Los canadienses cierran en Guadalajara su gira por el país
Viernes 15 de octubre de 2010, p. 9
El desenvolvimiento escénico e instrumental de los canadienses de Arcade Fire satisfizo a los 14 mil asistentes que se dieron cita en el Palacio de los Deportes la noche del miércoles, para escuchar los 18 temas que presentó la banda indie rock, todos parte de su reciente álbum, The Suburbs.
Cuando William y Win Butler, Régine Chassagne, Richard Reed Parry, Tim Kingsbury, Sarah Neufeld y Jeremy Gara, y la violinista Marika Anthony Shaw, invitada especial, salieron al escenario todo cobró forma en el Domo de Cobre; el ingrediente principal del platillo musical había tomado sus posiciones y el voraz apetito de sus fanáticos mexicanos comenzó a saciarse con Ready to start seguida de Keep the car running.
Muchas gracias por la espera
, lanzó Win, saludo que el público recibió con beneplácito, mismo que se materializó en gritos ensordecedores desde todos los puntos del recinto.
Consciente de la sequía a la que sometieron a sus seguidores, Arcade Fire continuó con el primer sencillo de su álbum, No cars go, seguido de Haiti, Sprawl ii y Modern man, momentos en que Bill, Win, Richard y Tim se movieron frenéticamente en el escenario con sus instrumentos, mientras Régine hacía gala de su talento al tocar, en diferentes momentos, los teclados, el pandero, el violín, la batería y la caja de ritmos; incluso se dio tiempo para agitar unos coloridos listones. Todas sus acciones fueron celebradas en exceso por sus fanáticos.
El público se fragmentó: los de abajo, quienes no dejaron de brincotear y bailar a lo largo de toda la velada, y los de las gradas, que se mostraron más mesurados, aunque se deschongaron con los éxitos más sonados de los canadienses.
Después de Rococo, The suburbs y In the backseat, con los que dieron muestra de la mezcla de sonidos, sello personal de la banda, el ambiente se tornó casi mágico con las entonaciones que alcanzó Régine, las cuales unieron al público en un enorme coro, sorprendente, ya que el respetable sabía las letras de las canciones a la perfección.
En ese tono siguieron Intervention, Crown of love, Tunnels y We use to wait. Régine continuó hechizando al público con su desenfreno creativo sobre el escenario. El recital terminó con Power out, Rebellion, Month of May y Wake up, uno de sus grandes himnos, que coronó la bonita velada, que público y músicos disfrutaron por igual.
Arcade Fire continúa su gira por el país. Ayer se presentó en el Festival Internacional Cervantino, en Guanajuato, y mañana cierra en la ciudad de Guadalajara.