Una de las mayores taras, la manipulación del sufragio a partir de la pobreza: Paredes
Miércoles 13 de octubre de 2010, p. 18
Durante el Foro Latinoamericano sobre la Democracia, el problema generado por la relación creciente con el dinero y democracia fue el centro del debate y las advertencias sobre el riesgo que esto implica.
El analista venezolano Teodoro Petkoff subrayó el papel de los grandes poderes fácticos en las elecciones para hacer ganar candidatos. Yo imagino al nombrar la soga en casa del ahorcado, ¿cuánto pesa Televisa aquí en México a la hora de tomar decisiones que tengan que ver con la Presidencia de la República?
No fue el único en alertar sobre el impacto que tiene el financiamiento de los partidos políticos en el subcontinente. Daniel Zovatto, director regional de IDEA Internacional, alertó sobre una mayor incidencia de las aportaciones ilegales en las campañas latinoamericanas. En contraste, dijo, hay un débil marco legal para contener y sancionar estos excesos, con la excepción mexicana, donde la autoridad aplicó sanción millonaria al PRI, no hay casos semejantes en la región
.
Durante el foro convocado por la Organización de Estados Americanos (OEA), el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y el Instituto Federal Electoral (IFE), Dante Caputo, asesor especial de la OEA, subrayó la importancia de atender el problema del vínculo dinero-poder-democracia, porque en ella se pueden encontrar trampas que ligan al voto con el dinero visto como poder.
Durante la discusión del tema Competencia electoral, la dirigente del PRI, Beatriz Paredes, sostuvo que una de las mayores taras de la democracia en la región es la manipulación del sufragio a partir de las condiciones de pobreza de los votantes. Es uno de los defectos más graves de la evolución
democrática de países latinoamericanos, que requiere ser enfrentada.
La mercadotecnia
Se refirió también a la mercadotecnia política que ha dominado las campañas en el pasado reciente, pues en la actualidad se ha tendido a la sustitución de los mensajes de contenido por la generación de candidaturas mercadotécnicas que reducen la política a la compra-venta de ofertas electorales, más que a la profundización del debate.
En esta lógica, el ex consejero presidente del IFE José Woldenberg destacó que a pesar del avance que tuvo el modelo de comunicación política en México, al reducir la incidencia del dinero en las campañas mediante la prohibición de compra de promocionales en medios electrónicos, esto no ha inhibido la espotización
de la política mexicana.
Consideró que esta es una consecuencia perversa de la reforma electoral que requiere corregirse, para que no sea por la vía de los promocionales como se realice la propaganda política en México, sino que se definan otros esquemas que permitan a los partidos difundir más sistemáticamente su oferta electoral.
Censuró otro efecto perverso del modelo de comunicación, que tiene que ver con la corrupción entre partidos y medios de comunicación, al utilizar la propaganda disfrazada.