El hecho de que la mayoría de las víctimas de la violencia existente en México sean jóvenes es una señal de que colectivamente estamos haciendo algo mal en el país, advirtió el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles.

Entrevistado tras la ceremonia en que se reconoció a los académicos que participaron en la investigación sobre la Real Expedición Botánica a Nueva España, de Martin Sessé y José Mariano Mociño, llamó a poner más atención a ese sector y a abordar de manera integral el problema de la inseguridad.

Resaltó que una de las soluciones para dar mejor perspectiva a la juventud es la educación, por lo que urgió al Poder Legislativo a corregir el déficit de 6 mil 500 millones de pesos para la enseñanza superior que presenta el proyecto presupuestal del Poder Ejecutivo para 2011.

He hecho muchos llamados para que tengamos más atención en el caso de los jóvenes. En ellos radica buena parte de la fortaleza que tiene este país; en ellos están las generaciones que deberán tomar las decisiones en los próximos años y conducir en los diferentes sectores a México. En ellos está la posibilidad de encontrar frescura y gran capacidad para emocionarse, comprometerse, y en ellos radican los valores y la responsabilidad.

Esas muertes duelen mucho más

El rector subrayó que la violencia en México es un flagelo que preocupa, afecta y duele en todos los sectores. Es un problema que un día se presenta en Nuevo León, otro en Chihuahua, en Tamaulipas, en Guerrero o Michoacán; no hay entidad federativa que esté fuera de la problemática, nuestra ciudad (Distrito Federal) incluida. Duele cualquier pérdida de vidas, pero cuando se trata de jóvenes duele mucho más.

Cuestionado sobre el proyecto de policía única propuesto por el Ejecutivo federal, dijo desconocer si esta estrategia podrá resolver el problema de la delincuencia. Ojalá sea una de las fórmulas para encontrar mayor articulación, porque, no hay duda, el problema requiere enfoque integral. Deseo que sea una medida que ayude a resolver el conflicto. Tocará al Congreso hacer las consideraciones para analizar las ventajas que la medida pudiera tener.

Sobre los recursos asignados a educación superior, confió en que la Cámara de Diputados apruebe más fondos para las universidades públicas, pues de 2000 a 2010 ese órgano ha otorgado al rubro 50 mil millones de pesos adicionales a lo propuesto anualmente por el Ejecutivo.

Sin embargo, lamentó que esta consistencia legislativa no se manifieste de igual forma en el presupuesto destinado a ciencia y tecnología. “Hay que reconocerlo, tal vez nos ha faltado hacer planteamientos más contundentes a muchos que tenemos que ver con esto. Pese a que la ciencia es fundamental, estamos invirtiendo el mínimo, incluso menos en relación con otros países con economías semejantes a la nuestra. Brasil destina al sector tres veces más de su producto interno bruto en relación con México, y también estamos por debajo del promedio de América Latina.

No todo es asunto de dinero, pero sin los recursos presupuestales es imposible poder tener mejor organización y mayor rendimiento. Espero que para ciencia y cultura también haya fondos adicionales.