América sacó la mejor parte del dinámico y disputado partido protagonizado ayer en la cancha del estadio Azteca, donde venció 3-2 a Santos, en una tarde nublada que de ninguna forma enfrió el compromiso de los 22 jugadores en la cancha.

Con el resultado en el cierre de la novena jornada del torneo Apertura 2010, América se ubicó en la segunda posición del grupo dos, con 15 unidades, mientras Santos se mantuvo en la misma casilla, pero del primer sector, con 18 puntos.

Sin cumplirse el minuto tres, Ángel Reyna tomó el control del esférico, recorrió en diagonal rumbo a la media luna, desde donde habilitó al uruguayo Vicente Sánchez, quien se la jugó solo ante el portero Oswaldo Sánchez, pero éste achicó para apagar el fuego que querían iniciar los de casa.

Pero ni tiempo tuvieron de acomodarse en sus asientos los 500 seguidores de Guerreros, porque para quitarles el susto, Juan Pablo Rodríguez envió un centro muy largo, que no pudo cortar el colombiano Aquivaldo Mosquera, aunque sí aprovechó Christian Benítez para, con severo cabezazo, abrir el tanteador, al minuto cuatro, con lo que los visitantes se regodearon en las tribunas.

Tras el décimo tanto del ecuatoriano en el torneo, el juego cobró más dinámica, con ataques a profundidad de ambas partes, sin dominio de ningún cuadro. América trabajó para crearse una opción más, al momento en que el argentino Daniel Montenegro recibió la pelota, se acomodó y soltó potente disparo cruzado por la derecha, que Sánchez apenas pudo rechazar para enviar a tiro de esquina.

El empate de Vicente Sánchez

Los anfitriones llegaban, pero no podían abrir la defensiva santista, aunque de tanto insistir Óscar Rojas condujo el esférico, hizo una pared con Vuoso y luego sirvió a Vicente Sánchez, quien sólo acomodó la pierna para rebotarla y firmar el gol del empate, al minuto 22.

Los locales siguieron presionando. Al 28, el capitán Pável Pardo se encargó de cobrar una falta desde fuera del área, en tiro directo, y aunque todo apuntaba para convertirse en el de la diferencia, Fernando Arce corrió unos segundos antes desde la barrera a cubrir el hueco por donde entraría la pelota, brincó y así evitó la anotación.

Pero ya estaba escrito que era momento de darle vuelta al cotejo, ya que en la siguiente jugada Santos salía en dirección de la portería americanista, pero Juan Carlos Valenzuela se hizo del esférico, quiso habilitar de inmediato al Rolfi Montenegro, que no alcanzó, pero se convirtió en un servicio dorado, por lo exacto, para el naturalizado Vicente Matías Vuoso, quien condujo solo sobre el centro del terreno y burló a Oswaldo para hacer el 2-1. No festejó por el respeto que le tiene a su antiguo club.

Santos parecía confundido en la cancha, lo que le salió caro, ya que al cobrar un tiro de esquina por izquierda al poste contrario, Aquivaldo Mosquera hizo el esfuerzo por rematar de cabeza, pero sólo dejó el balón a modo para Vuoso, quien volvió a perforar la portería de Oswaldo, para el 3-1, al minuto 37, ahora sí con una ligera celebración.

El encuentro estaba a punto de ebullición, cercano de estallar en cualquier momento, y fue al minuto 41 cuando el argentino Daniel Ludueña envió un centro sin peligro alguno, Valenzuela intentó despejar, pero el balón rebotó en el travesaño y Fernando Arce se lanzó de palomita para el 3-2, en vistosa jugada. El marcador final ya estaba escrito, no así el capítulo de las emociones.

Todavía se dieron tiempo los visitantes para otra ofensiva antes del silbatazo de medio tiempo, cuando a centro de Jorge Estrada, Benítez remató de volea, que rozó el travesaño para fortuna de los casa.

En la parte complementaria, ambos salieron con sed de más goles y desde el arranque hilvanaron jugadas, como esa cuando Arce, desde la izquierda, recibió el balón, y sin pensarlo soltó el obús, que alcanzó a desviar Ochoa para salvar su meta.

Luego, en una ofensiva de los anfitriones, volvió a lucir Vicente Matías Vuoso, quien entre varios rivales finalmente nada pudo conseguir, pero para deleite de los suyos, Rosinei protagonizó un remate con el clásico chanflazo, que apenas salió desviado.

Frecuentemente amonestado, ayer el brasileño Rosinei estuvo apenas unos minutos tras haber entrado en la segunda parte, cuando vio la tarjeta de expulsión, luego de ponerle una plancha a Darwin Quintero, al minuto 66.

Las emociones seguían en aumento, no se daban tregua, acaso para los cambios. Los porteros estuvieron en máxima alerta, y lo mismo Guillermo Ochoa salvó su meta, al minuto 65, con gran estirada, que Oswaldo, al 75, cuando expuso su humanidad para evitar que América ampliara el marcador.

En las tribunas, ocupadas con regular entrada, los oles, los cánticos, los gritos de desesperación fueron la constante, apagados las más de las veces por la oportuna intervención de los porteros, como la última atajada de Ochoa, en tiempo de compensación, que lo confirmó como la mejor pieza de la tarde.

Manuel Lapuente, técnico del América, en la reunión con los medios, dijo que le gustó la forma en que se jugó y obviamente el triunfo, porque fuimos consistentes y constantes. Lástima de la expulsión de Rosinei Adolfo, pero si no, hubiéramos seguido adelante.

Agregó que desde luego se ha mejorado en el equipo, porque ahora jugamos a un toque y a dos, ofensivo desde el inicio hasta el fin, aunque consideró que todavía no está satisfecho, pues eso solamente lo logrará cuando ganemos el campeonato, y eso quién sabe.

Rubén Omar Romano, estratega de Santos, y el portero Oswaldo Sánchez coincidieron en señalar que sucumbieron debido a sus errores.

El timonel destacó lo que consideró buena actuación del portero Ochoa y hasta dijo que de haber sido de otra forma Santos podría haber ganado.

Romano y Oswaldo apuntaron que el resultado justo del encuentro pudo haber sido un empate, debido al buen futbol que mostraron ambos equipos.