Buenos Aires, 16 de septiembre. Miles de estudiantes y maestros con apoyo de organizaciones sociales marcharon esta noche a Plaza de Mayo al conmemorarse el 34 aniversario de la llamada Noche de los lápices cuando diez adolescentes que demandaban el boleto estudiantil fueron secuestrados en plena dictadura militar y siete de ellos continúan desaparecidos, lo que se unió hoy al rechazo a la política del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, que preside el empresario derechista Mauricio Macri.

La marcha se realizó a más de un mes del conflicto por la demanda estudiantil para la mejora de los edificios de escuelas secundarias, en serias condiciones, lo que llevó a la toma de unas 38 escuelas desde principios de septiembre, mientras que los maestros culminaron dos días de paro en esta capital, que tuvo un acatamiento de más de 97 por ciento contra las políticas salariales del gobierno de la ciudad y en apoyo a los estudiantes.

Macri dijo hoy que el que no trabaja no cobra al anunciar que descontará a los maestros las 48 horas de paro. También antes su gobierno fue repudiado por estudiantes, maestros y una diversidad de organizaciones cuando dio la orden de que se le pasaran las listas de estudiantes que participaban en las tomas.

Esto se suma a la situación que viven Macri y algunas figuras de su gabinete por el descubrimiento de espionaje telefónico a dirigentes sindicales de maestros y otras personas y por la cuál es investigado por la justicia y la legislatura de la capital. Los representantes de la variada oposición al gobierno porteño han solicitado el juicio político del alcalde de la capital.

Los maestros han parado varias veces y demandan ahora nuevos reacomodos salariales. Los estudiantes, a su vez han realizado diversas marchas contra el gobierno capitalino como la de septiembre de 2008, cuando además de conmemorar la Noche de los Lápices repudiaron la reducción de las becas estudiantiles y del presupuesto de educación en 50 por ciento y otras similares.

Durante la marcha de este día pararon frente al edificio de la municipalidad quemaron un muñeco allí y lanzaron huevos contra el frente , pintando varias leyendas en las paredes entre las cuáles una se repitió varias veces: Macri vos sos la dictadura.

Los jóvenes estudiantes secundarios fueron apoyados por alumnos de escuelas terciarias (superiores de enseñanza no universitaria) y mediante paros y clases públicas de varias facultades de la Universidad Nacional de Buenos Aires. (UBA).

Por su parte, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió hoy memoria, verdad y justicia ante esta conmemoración y recordó a Claudio de Acha, una de las víctimas de la Noche de los Lápices a quien conoció cunado era compañero de su hermana en el Colegio Nacional de la Plata. La mandataria reclamó el no olvido de esos hechos.

En septiembre de 1976, en un operativo realizado por el Batallón 601( de inteligencia) del ejército y la policía de la provincia de Buenos Aires, dirigida por el general (ya fallecido) Ramón Camps fueron secuestrados los jóvenes estdudiantes, a los que se recuerda en conmovedoras marchas en todo el país.

Como señalaron los estudiantes el mejor homenaje es la lucha por el derecho a la educación pública para todos, y exigiendo el fin del vaciamientos de las instituciones educativas, culturales, de salud y otras y los eternos intentos de privatizar escuelas y universidades públicas como sucedió en los años 90.

Denunciaron que el gobierno de Macri respondió mandando a confeccionar listas negras con los nombres de los estudiantes de las tomas, la misma práctica de la pasada dictadura para marcar a quienes luego secuestrarían y que están desaparecidos en la mayoría de los casos .

Recordaron que el gobierno de la ciudad utiliza un discurso similar al de la dictadura para descalificarlos, ayudados por los medios masivos del poder económico que Macri representa y que tratan de estigmatizarnos a los que tomamos compromisos serios con la realidad social del país, así como descalifican toda participación política de los sectores populares si se hace con independencia de los partidos patronales.

Acusaron a Macri de ser un admirador de la pasada dictadura militar (1976-1983) y sostuvieron que “cada vez son más notables sus métodos de control social, contra familias en situación de calle y otros atentados contra la población , lo que ha llevado a la renuncia de sus funcionarios por escándalos como los de las escuchas ilegales.

Asimismo recordaron que el gobierno de Macri habilitó una línea telefónica para que para que los trabajadores de la municipalidad capitalina denunciaran a sus propios compañeros de trabajo.

Nada nos hará callar cantaron los jóvenes esta noche a su paso por la sede municipal . Estuvieron además acompañados por la Coordinadora de Lucha en la Ciudad contra las políticas del gobierno capitalino.