Jesús Ortega Martínez permanecerá como presidente nacional del PRD hasta marzo próximo, cuando en sesión de Consejo Nacional se elija a la nueva dirigencia del partido.

Ante la imposibilidad de construir un acuerdo entre los dos bloques en disputa por la dirección perredista, pasadas las 11 de la noche los consejeros del Movimiento por la Recuperación del Proyecto del PRD tomaron la tribuna del Consejo Nacional, lo cual condujo a que se declarara un receso indefinido de la sesión plenaria para buscar una solución en una mesa política el próximo lunes.

Así los opositores a Ortega evitaron que Nueva Izquierda, Alternativa Democrática Nacional (ADN) y Foro Nuevo Sol se impusieran para definir una nueva ruta crítica en el PRD, que incluye la renovación de la dirigencia nacional en marzo de 2011.

No obstante, dicha corriente hizo una demostración de fuerza cuando ese bloque consiguió, con 146 votos contra 97, que se sacara del orden del día la estrategia electoral 2010-2012, y con 142 sufragios contra 93 no se incorporara, como propuso el Movimiento por la Recuperación del Proyecto del PRD, la convocatoria para elegir a la directiva nacional el 5 de diciembre próximo.

Los diferendos entre los grupos propiciaron que los trabajos del octavo pleno ordinario del séptimo Consejo Nacional arrancaran alrededor de las 18 horas, en medio de inconformidades de algunos miembros del citado movimiento, integrado por ocho corrientes –Izquierda Democrática Nacional, Izquierda Social, Democracia Social, Grupo de Acción Política, Movimiento por la Democracia, Unyr y Redir-MLN y Red por la Unidad de las Izquierdas– al enterarse de que el viernes por la tarde hubo un encuentro en la casa del jefe de gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, para perfilar una salida.

En ambos bloques se confirmó que en ese encuentro participaron, además de Ebrard, René Bejarano, Jesús Ortega, Héctor Bautista y Carlos Navarrete. Ahí se reforzó el planteamiento de que el cambio de dirección se dé en marzo de 2011.

A partir de esa reunión, Nueva Izquierda y ADN consensuaron una propuesta con siete puntos, que expusieron a dirigentes del Movimiento por la Recuperación del Proyecto del PRD ayer por la mañana, y que ahondó los desacuerdos.

El texto, denominado Resolutivo de la unidad partidaria para el avance democrático, plantea que es necesaria la más amplia unidad de la izquierda, así como la conformación de extensos frentes políticos para las próximas elecciones.

Añade que es indispensable superar los escenarios de descalificación y confrontación para arribar a un gran pacto que tenga como objetivo esencial acceder al gobierno federal en 2012.

Como parte de los siete puntos, se propone que la fecha de renovación para la presidencia y secretaría general nacionales se efectúe el 20 de marzo de 2011, mediante votación de los consejeros nacionales, con base en el artículo 269 del estatuto y que en sesión inmediata a esos nombramientos, el consejo elija un nuevo Comité Ejecutivo Nacional.

El dirigente perredista Jesús Ortega, durante el segundo día de trabajos del Consejo Nacional de ese partido, en el cual se concretaron pocos acuerdosFoto José Antonio López

Incluyeron un punto que al final ADN y Nueva Izquierda decidieron dejar fuera de la discusión: se reafirma la necesidad de que la candidatura del PRD a la Presidencia de la República sea el resultado de la evaluación que el Consejo Nacional realice, a fin de seleccionar al precandidato mejor posicionado.

Las negociaciones que a lo largo de la mañana y parte de la tarde tuvieron lugar para tratar de destrabar el conflicto interno propiciaron que el gobernador electo de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, no fuera recibido por el pleno al mediodía, como estaba programado. Puntual, el político paseó frente a la Expo Reforma, donde se congregan los perredistas, pero como no había sesión se fue.

Al reanudarse los trabajos del consejo, Jesús Ortega dio un discurso en el cual expresó su disposición para dejar la presidencia nacional del PRD, como parte de un gran pacto por la unidad.

Les propongo que logremos la mayor unidad y cohesión que nos permita enfrentar con capacidad y con fuerza el desafío de las elecciones presidenciales de 2012. No me opongo a la renovación adelantada de las direcciones del partido, dijo. Encontremos el momento adecuado, tomemos en cuenta las elecciones.

¡Hoy, hoy, hoy!, le gritaron consejeros de Izquierda Democrática Nacional, y Ortega pidió hacer un análisis sereno de su propuesta, sin gritos y con diálogo.

Cerca de las 11 de la noche, los perredistas concluyeron apenas la discusión, punto por punto, del orden del día. Una propuesta de Miguel Barbosa, dirigente de Nueva Izquierda, para hacer un reordenamiento al respecto, provocó que Dolores Padierna acusara al bloque mayoritario de agudizar la crisis interna. Dijo que quieren anular el debate y la discusión. Con dinero pretenden comprar a consejeros, señaló; esto provocó protestas. ¿Y las ligas?, Bejarano es el que compra, le gritaron algunos.

No me salgan a estas alturas con que (Carlos) Ahumada no les dio dinero, y ahora andan haciendo acuerdos con (Felipe) Calderón. ¡Vergüenza les debería dar!, respondió la dirigente.

Cerca de la medianoche los consejeros del Movimiento por la Recuperación del Proyecto del PRD tomaron la tribuna del Consejo Nacional al grito de ¡Obrador, Obrador! y PRD, sí. PRI-PAN, no.

Los perredistas de Nueva Izquierda, ADN y Foro Nuevo Sol les respondieron: ¡porros, porros, porros! y ¡fuera Bejarano, fuera Bejarano!.