Domingo 5 de septiembre de 2010, p. 16
Ayer el auditorio del Museo Casa León Trotsky no alcanzó para albergar a las decenas de jóvenes que se reunieron para homenajear al revolucionario soviético, en el contexto de la conmemoración de su 70 aniversario luctuoso.
Convocados por la Liga de Trabajadores por el Socialismo (LTS), sostuvieron que la actual crisis económica internacional está reactualizando las premisas que plantearon los revolucionarios de principios del siglo XX, en donde una fuerte crisis económica mundial, en detrimento del bienestar de la clase trabajadora, orilla a la movilización e insumisión de los sectores populares.
Esta situación de crisis abre las vías para la construcción de organizaciones revolucionarias y, en ese marco, es muy importante el legado de Trotsky
, afirmó Jimena Mendoza, de la LTS.
El homenaje contó con la intervención de representantes de organizaciones socialistas, como la agrupación de mujeres Pan y Rosas o de jóvenes de Barricada de Ecatepec, quienes se solidarizaron con los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas y anunciaron una marcha en la ciudad de México el 28 de septiembre, para exigir la libertad de las encarceladas en Guanajuato y el aborto libre y seguro en todo el país.
Se proyectaron videos alusivos a la vida y obra política de Trotsky y se presentó una mesa redonda en la cual participaron Sandra Romero, dirigente de Pan y Rosas, quien abordó el legado del revolucionario soviético en las luchas antimperialistas de América Latina; Sergio Moissens, de la LTS, abogó por la reconstrucción de la Cuarta Internacional para hacer frente al deterioro de la situación de la clase trabajadora, y Andrés Aullet, abogado laboralista, hizo un llamado a la reorganización de los trabajadores y del movimiento sindical, así como de sus estrategias de lucha para frenar los impactos de la crisis económica en los sectores populares.