Francisco Solano Urías, presidente del Partido Acción Nacional (PAN) en Sinaloa, pidió este lunes al gobernador Mario López Valdez (Malova), emanado de una alianza opositora al Partido Revolucionario Institucional (PRI), que sea prudente y cuide su vida, ante la alta incidencia delictiva y los ataques contra servidores públicos en todo el país, como alcaldes y diputados.

Ya han ido sobre alcaldes y candidatos; por eso uno teme siempre al salir de casa; también los ciudadanos temen, más un gobernador, dijo Solano Urías. Entrevistado en Culiacán, Sinaloa, el dirigente panista consideró que los principales problemas a los que Malova se enfrentará cuando asuma el cargo de gobernador serán la impunidad y la inseguridad, por los grupos delictivos que operan en la entidad y la complicidad entre éstos y las autoridades.

De su lado, el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, dijo no compartir la perspectiva de Malova, quien afirmó el domingo anterior que al paso que vamos lo que sigue es que el crimen organizado asesine a un gobernador.

Peña Nieto negó en Ixtapan de la Sal, donde inauguró el ciclo escolar 2010-2011, tener miedo a ser víctima de un ataque del crimen organizado. Estoy cierto de que en el desempeño de cualquier actividad del orden político existen riesgos, son naturales a la actividad que uno desempeña, pero no hay por ello el que esto nos inhiba o vaya en detrimento verdaderamente de la responsabilidad que tenemos, de lograr una actuación eficaz del estado y de los gobiernos que son nuestra responsabilidad para cumplir con este objetivo mayor, que es brindarle seguridad pública a toda la población, dijo.

Sin embargo, Enrique Peña toma sus previsiones desde el asesinato del candidato priísta al gobierno de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú, ocurrido a principios de julio pasado. Desde esas fechas, el mandatario aumentó el número de sus escoltas y reclutó tres elementos que laboraron para el Estado Mayor Presidencial en la vigilancia de Vicente Fox Quesada.

Para ingresar a un acto encabezado por Enrique Peña Nieto se debe pasar por detectores de armas, después por escáneres que portan policías estatales vestidos de civil, y posteriormente los asistentes son remitidos a áreas dispuestas para invitados.

Mientras, el gobernador electo de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, descartó reforzar su seguridad ante una eventual agresión de la delincuencia organizada a un mandatario estatal. Espero que no sea así, debemos seguir en la lucha contra la delincuencia organizada, dijo en la capital oaxaqueña, en respuesta a Malova.