El Gobierno del Distrito Federal (GDF), en voz de la titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Martha Delgado Peralta, y del subsecretario de Coordinación Metropolitana, Héctor Hernández Llamas, condicionó el diálogo con los vecinos de La Malinche que se oponen a la supervía poniente, a que se fijen reglas claras y se realice en un espacio seguro. De cumplirse lo anterior, aseguraron los servidores públicos, la mesa podría comenzar a partir de mañana (este miércoles).

En entrevista realizada en las instalaciones de La Jornada, Hernández Llamas reconoció que existe la percepción de que las autoridades han querido minimizar las acciones de resistencia de los colonos; sin embargo, dijo, esta interpretación es falsa.

Delgado Peralta afirmó que no promueve la supervía poniente y que no es una obra que realice la secretaría a su cargo. Al preguntarle si el título de concesión resulta ventajoso para la compañía constructora, pues entre otras cosas considera que en caso de que el gobierno no logre liberar el derecho de vía se le reembolsará con intereses el dinero que haya invertido y que la concesión de 30 años pueda ampliarse si no se alcanzan las ganancias previstas, respondió: Yo no sé. La verdad no podría responder. Pero sí he estado en entrevistas con el secretario de Obras (Fernando Aboitiz) y él ha dicho que el riesgo lo lleva la empresa al ciento por ciento. Tendrían que preguntarle a él.

El movimiento de resistencia pacífica de los habitantes de La Malinche ha impedido que las autoridades entreguen en su totalidad el derecho de vía a la concesionaria.

No le sacamos

Al respecto, Hernández Llamas dijo: Diálogo sí. ¿Cuándo? Mañana (este miércoles). ¿Pero cuáles son las reglas? ¿Qué temas vamos a discutir? ¿Quiénes participan? No le sacamos, nos interesa.

Delgado añadió: “Yo sólo hablo por el tema ambiental. El problema es muy complejo y hay muchas áreas de gobierno involucradas. La manifestación (de impacto ambiental) fue pública desde el primer día y yo contacté a Luis Zambrano y Cristina Barros (integrantes del movimiento) para invitarlos a mi oficina y analizarla, pero no quisieron. Me dijeron: ‘Mejor vengan ustedes acá (a La Malinche) y lo exponen’. Pero en qué condiciones, o sea, que te vayan a tirar ahí. La verdad no, no era institucional.”

El subsecretario de Coordinación Metropolitana reconoció que las autoridades han dado pie al desconcierto y preocupación entre la comunidad y que el título de concesión –que, aclaró, no conoce en su totalidad–, tiene algunas cláusulas que, interpretadas bajo cierta lectura provocan legítima preocupación. Sin embargo, afirmó que al no ser un neófito y tampoco un ingenuo se ha percatado que se ha hecho mal uso de la desinformación.

La titular de Medio Ambiente calificó la resolución administrativa que realizó la secretaría a su cargo de una conquista muy importante del movimiento ambientalista e incluso aseguró que dicho dictamen es muy superior a las observaciones que recibieron de especialistas.

Coadyuvar o no coadyuvar...

Martha Delgado argumentó que la zona de la ciudad en la que se construirá la supervía poniente tiene una dinámica urbana muy compleja: Tenemos más de 24 mil alumnos, 78 mil empleados no sólo en Santa Fe, sino en Cuajimalpa, Magdalena Contreras y Álvaro Obregón. Hay 220 mil personas y alrededor de 143 mil vehículos en esa zona, que es una de las que concentran el mayor porcentaje de decisiones económicas en el país.

Respecto de la séptima condición del título de concesión, que estipula que las autoridades gubernamentales coadyuvarán con la concesionaria en la obtención de autorizaciones, licencias y permisos, incluyendo, sin limitar, las autorizaciones que se requieran en materia ambiental, Delgado Peralta afirmó: La cuestión es cómo se interprete el término coadyuvar. Para mí no es que si no cumplen con la ley los vas a admitir, de ninguna manera, porque también en el propio título se establece que ellos (la concesionaria) deben cumplir con la ley (...). La verdad ignoro por qué se puso así. Lo que sí te puedo decir es que nosotros hicimos el dictamen sin conocer exactamente esa condición.

El título de concesión fue firmado el 6 de abril de 2010 y 14 días después se publicó un decretó en el que se declara a La Loma como área natural protegida. El artículo 8 de dicho decreto autoriza la construcción de los túneles subterráneos, los cuales ya estaban considerados en el proyecto de la supervía poniente.

Entrevista realizada por los reporteros de la sección Capital