Hombres armados levantaron al periodista Ulises González García, director del periódico semanal La Opinión, de la ciudad de Jerez, ubicada 60 kilómetros al sur de la capital de Zacatecas, informaron sus colegas.

Testigos dijeron que la madrugada de este miércoles González García fue sacado de su domicilio y llevado por la fuerza. Presumiblemente los delincuentes reclaman pago de rescate del comunicador, pero ni su familia ni las autoridades de Zacatecas han emitido declaración al respecto.

Los periodistas de Jerez recuerdan que el director de La Opinión ha reclamado desde hace varios meses a la rectoría de la Universidad Autónoma de Zacatecas transparencia informativa respecto al monto de la pensión que cobran los rectores jubilados de esa institución.

Durante los cinco días recientes al menos tres reporteros locales, quienes trabajan para la Organización Editorial Mexicana, Grupo Editorial Zacatecas y una radiodifusora de Fresnillo, han sido amedrentados directamente y hasta perseguidos por presuntos miembros del crimen organizado.

Casi a la medianoche del martes, desconocidos hicieron en una barda de la avenida de las Torres, en Ciudad Juárez, Chihuahua, una pinta que dice: “Periodista Martín López del 44, te vamos a mochar la cabeza y a tu hermano por apoyar al Patas cortas”.

Martín López Castro es periodista del canal 44 de televisión desde hace muchos años y su hermano Donaldo trabaja de agente de tránsito; antes fue policía judicial del estado y ayer fue detenido en El Paso, Texas, con un cargamento de armas de grueso calibre que pensaba trasladar a Ciudad Juárez.

En Latinoamérica, México es ya considerado uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, dijo Cinthia Cárdenas, consultora legal de la Oficina de México y Centroamérica de la organización internacional Artículo 19.

En una conferencia de prensa efectuada en Boca del Río, Veracruz, dijo que en 2009 se contabilizaron 244 agresiones. Los estados más peligrosos para ejercer el periodismo son Guerrero, Chihuahua, Oaxaca, Veracruz y Durango, agregó.

El 65 por ciento de las agresiones a reporteros, consideradas por las leyes como leves, fueron cometidas por funcionarios públicos. Entre ellas se encuentran homicidios y desapariciones vinculadas al crimen organizado.

En Morelos se ha amenazado, intimidado y agredido a periodistas sin que las autoridades del estado asuman su responsabilidad y ordenen medidas para proteger a los representantes de medios de comunicación y garantizar la libertad de expresión, señaló por su parte la Comisión Independiente de Derechos Humanos (CIDH) del estado.

José Martínez Cruz, vocero de este organismo, dijo que para denunciar estos hechos la CIDH envió escritos a la Oficina del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México, la Comisión de Derechos Humanos del Senado mexicano y al Programa de Agravios a Periodistas de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

La CIDH informó que en abril pasado 27 periodistas denunciaron e iniciaron una demanda penal por amenaza de muerte vía electrónica. A pesar de ello, el proceso legal no fue concluído.