Chalco, Méx., 10 de julio. Comerciantes del tianguis que se instala los viernes en el centro de Chalco golpearon a dos presuntos integrantes del grupo delictivo La Familia. Los vendedores dijeron estar cansados de las extorsiones a las cuales los someten unos 20 sujetos, varios armados, quienes cada semana cobran una cuota a cambio de no atentar contra su integridad física.

La golpiza ocurrió la tarde del viernes pasado, en el bulevar Cuauhtémoc, donde los vendedores capturaron a dos hombres quienes dijeron llamarse Alexis Gabriel Hernández Ramírez y Javier Roa González, ambos de 24 años de edad.

Estos sujetos y sus cómplices arribaron al tianguis a las 11 de la mañana, y pasaron con cada vendedor, para exigir su cuota semanal en efectivo.

Alrededor de las 15 horas, la gente se armó de valor e interceptó a algunos extorsionadores, aunque la mayoría de éstos se dio a la fuga, y abandonaron en la zona la camioneta matrícula 22-96-NT, en la cual había mercancía que previamente quitaron a comerciantes que se negaron a pagar la contribución.

Los tianguistas golpearon a Roa González y a Hernández Ramírez, al grado que pusieron en riesgo la vida de este último. Elementos de la Policía Ministerial del estado arrestaron a los dos sujetos, y los pusieron a disposición de la agencia del Ministerio Público, pero ninguno de los vendedores acudió a la procuraduría mexiquense a declarar en su contra.

La actual oleada de extorsiones comenzó en el estado de México durante el sexenio de Felipe Calderón y al principio, la delincuencia sólo presionaba en Chalco a propietarios de bares, centros nocturnos y los llamados table dance, quienes hasta la fecha pagan protección a La Familia.

Sin embargo, de dos años a la fecha, la extorsión se extendió contra operadores del transporte público, fleteros y transportistas de carga y políticos. Además, el crimen organizado recorre todos los negocios establecidos sobre las carreteras México-Puebla, México-Texcoco, la autopista México-Puebla, y en la carretera libre México-Cuautla.

Se extiende la exigencia de rentas

En zonas urbanas, el crimen organizado recoge cuotas en mercados públicos, tiendas de abarrotes, tortillerías y cualquier negocio establecido. De unos meses a la fecha, la exigencia de rentas se extendió a los tianguis.

Recientemente, la fracción del Partido de la Revolución Democrática en el Congreso local aseguró que el crimen organizado extorsiona en todos los niveles económicos, lo mismo a presidentes municipales que a quien instala un puesto de tacos en la vía pública.

El 14 de abril anterior, el propietario de una carnicería ubicada en el municipio de Amecameca fue asesinado con armas de alto poder junto con su hijo. El crimen fue interpretado como una amenaza para los comerciantes, con la intención de que paguen una cuota semanal o mensual.

El último homicidio múltiple en la zona ocurrió el 26 de junio pasado, cuando fueron asesinadas tres personas en el municipio de Texcoco. Se dijo que las víctimas eran integrantes de Los Zetas, y que se les asesinó por intentar cobrar cuota a un centro nocturno que estaba bajo control de integrantes de La Familia.