Los grupos parlamentarios de oposición criticaron ayer en la Comisión Permanente el giro a una estrategia mediática del presidente Felipe Calderón para defender su política contra el crimen, y una vez más demandaron el cambio de las tácticas para detener a los cárteles de la droga.

Luego de que Calderón publicó el pasado lunes un desplegado, y tras su mensaje la noche del martes, senadores y diputados de PRI, PRD y PT aprobaron un exhorto a convocar de emergencia al Consejo Nacional de Seguridad Pública para que diseñe un programa de respaldo a los estados, especialmente Nayarit, y exigieron al Ejecutivo dejar de utilizar el término guerra para definir sus acciones de combate al narcotráfico.

Las críticas surgieron a partir de un punto de acuerdo para exhortar al gobierno federal a enviar fuerzas federales a Nayarit, donde el gobernador Ney González decidió el fin anticipado del ciclo escolar para evitar cualquier agresión a alumnos y profesores.

El Presidente ha fracasado. Le hemos dado todo y no funciona. Está bien que la idea sea que la droga no llegue a nuestros hijos, pero desde que llegó Calderón están matando a esos hijos, expresó el presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, Rubén Moreira (PRI).

A su vez, César Augusto Santiago (PRI) dijo que si el mandatario quiere mantener la campaña de promoción de su errática estrategia, lo haga con su salario y no con los recursos públicos. Sostuvo que la ironía del fracaso de la política de seguridad es que entre más recursos le aprueba el Congreso más muertos hay en este país: más de 20 mil muertos; no se trata de soltar a los soldados a la calle sin tener una lógica que atienda las causas y no los efectos del problema, pero ahora para solaz de los expertos en comunicación, resulta que la estrategia contra el crimen es mediática.

El diputado José Luis Ovando (PAN) sostuvo que siempre es tentador sacar raja política al tema de la inseguridad, y afirmó que las otras bancadas sólo ponen los números de fallecidos en la mesa y no hablan de los números de la droga confiscada, de las armas, de los vehículos, que muestran con claridad los avances.

Pablo Escudero Morales (PVEM), presidente de la Comisión de la Función Pública, sostuvo que si bien nadie duda de que es necesario el combate a la delincuencia, lo que se cuestiona es la estrategia fallida.

Por otra parte, ante la postura del PAN, Rubén Moreira refirió que cuando Calderón lanzó el grito de guerra, no convocó a un encuentro con gobernadores y alcaldes para echar a andar una estrategia conjunta. Pero cuando le empezaron a tupir busca otras salidas. Que haga un alto en el camino no implica que se eche para atrás, sino que reflexione y rectifique, afirmó.

Silvano Aureoles, senador del PRD, sostuvo que los dos mensajes de Calderón sólo abonaron a la confusión y alertó que en tanto el Ejecutivo no entienda que en el problema de la violencia y el tráfico de drogas subyace una ruptura del tejido social, los tiros estarán siendo lanzados de manera equivocada.

Carlos Navarrete (PRD), presidente de la mesa directiva del Senado, resaltó que ningún partido tiene una propuesta alternativa viable a la que ejerce Calderón; expuso que los tres niveles de gobierno han sido superados por el crimen, y sobre el cierre anticipado de escuelas en Nayarit, comentó: Prefiero que los niños pierdan una semana de clases a que se vean envueltos en una balacera.