Mientras los países desarrollados reciclan entre 35 y 60 por ciento de la basura que generan, en México apenas se reutiliza 12 por ciento, indicó el titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan Rafael Elvira Quesada.

Agregó que en la actualidad sólo 60 por ciento de los residuos se deposita en rellenos sanitarios, mientras el 40 por ciento restante se va a tiraderos que no cumplen con los requisitos formales.

En conferencia de prensa, en la que se dio inicio al programa de cooperación ambiental entre la dependencia y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Juan Elvira Quesada resaltó la necesidad de que la industria participe en la integración de centros de separación de desechos para que puedan elevarse los niveles de reciclamiento.

En tanto, el presidente de la Coparmex, Gerardo Gutiérrez Candiani, sostuvo que, además de lo que implica en términos de responsabilidad social, para los empresarios la sustentabilidad es un buen negocio, debido a los ahorros que se pueden generar.

Aseguró que, en conjunto, las 555 empresas que participan en el programa de liderazgo ambiental para la competitividad –entre las cuales hay varias afiliadas a la Coparmex– lograron ahorros anuales por casi 849 millones de pesos y tardaron alrededor de seis meses y medio en recuperar lo que invirtieron en mejoras a sus sistemas de producción y aprovechamiento de materiales.

Estas empresas están ahorrando 1.76 millones de metros cúbicos de agua por año, suficiente para abastecer a casi 3 mil 500 familias. En materia de energía, el ahorro es equivalente al consumo de 65 mil hogares, sostuvo el dirigente.

Agregó que los ahorros logrados por dichas empresas en materia de emisiones de bióxido de carbono equivalen a sacar de circulación 38 mil 500 autos compactos.

Además, han reducido sus residuos sólidos en cerca de 63 mil toneladas anuales, cifra similar a la que genera en dos meses una ciudad como Monterrey, sostuvo.

No obstante, el dirigente aseguró que México sigue siendo excesivamente dependiente de los combustibles fósiles como fuente de energía, que además de no ser renovables son altamente contaminantes. ‘Llegamos tarde, y con lentitud, al desarrollo de energías alternativas, como la eólica, la solar o los biocombustibles, sostuvo.

Insistió en la pertinencia de diseñar incentivos fiscales para las empresas que hagan uso eficiente de los recursos naturales, consideren inversiones con miras a lograr efectos medioambientales positivos y mejoren su gestión ecológica.