Brasil, Ecuador y Venezuela también boicotearán encuentro con la UE
Jueves 6 de mayo de 2010, p. 23
La Paz, 5 de mayo. El presidente boliviano, Evo Morales, anunció hoy que no asistirá a la sexta cumbre entre la Unión Europea (UE), América Latina y el Caribe los días 18 y 19 de mayo en Madrid, si se presenta en ese evento el nuevo mandatario hondureño Porfirio Lobo, con lo que se sumó a las posiciones en ese sentido de sus colegas de Brasil, Ecuador y Venezuela.
El martes, varios de los países participantes en la cumbre extraordinaria de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) advirtieron que no asistirían a la reunión de Madrid si acude Lobo. Si bien no hubo consenso, entre los mandatarios más firmes contra tal asistencia destacaron el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, el venezolano Hugo Chávez y el ecuatoriano Rafael Correa.
Morales condenó que Manuel Zelaya, el presidente derrocado el 28 de junio de 2009, continúe exiliado en República Dominicana, y expresó en el Palacio Quemado de La Paz su solidaridad con la posición de Lula de no ir a Madrid si se insiste en la participación de Porfirio Lobo, surgido de comicios organizados por los golpistas.
Sólo dos de los países que integran el bloque sudamericano –Perú y Colombia– reconocieron al gobierno de Lobo.
El gobierno español, que ejerce la presidencia en turno de la UE, lleva a cabo intensas gestiones diplomáticas para evitar que las diferencias en torno al nuevo gobierno de Honduras lleven a varios países sudamericanos a boicotear la cumbre presidencial de Madrid. Incluso trascendió que estaría tratando de contactar a Zelaya para buscar una salida.
España dijo que no ha recibido comunicación de ningún presidente latinoamericano de que no asistirá a la cumbre, en referencia a la advertencia del mandatario ecuatoriano Rafael Correa. No nos damos por enterados
porque no ha habido declaración oficial de la Unasur a España
, indicó una fuente diplomática española.
Según medios en Madrid, que citan fuentes del gobierno español, una de las soluciones para evitar el boicot podría consistir en que Zelaya retorne a Honduras antes de la cumbre en puerta. Esto podría ser visto como un gesto de reconciliación
, se estima.