Integrantes de la corriente Unidad y Renovación (Unyr) rechazaron el proceso de refrendo y afiliación que a partir del 5 de mayo comenzará el PRD nacional, pues no existen garantías de confiabilidad, al dejar esta labor en manos de lo que consideraron una empresa patito vinculada a Nueva Izquierda (NI). En un pronunciamiento, el grupo político encabezado por Armando Quintero consideró que este ejercicio descansará en grupos corporativos y clientelares, con lo que alejará al partido de la sociedad. Refirió que la dirigencia nacional asignó esta tarea al grupo GANE, que no cuenta con ningún antecedente en producción masiva de credenciales ni datos susceptibles de evaluación, ni nada que demuestre que no está al servicio de una burocracia en el partido claramente cuestionada por la militancia y socialmente desacreditada. Advirtió que el padrón nacerá muerto por inconfiable y excluyente, por lo que será el principio de una escalada de inconsistencias futuras, provocadas por la línea imperante en la dirección actual del partido.