La Comisión Ejecutiva Nacional del Partido del Trabajo (PT) determinó ayer no participar con el PRI o el PAN en ninguna alianza en el país, a excepción de Oaxaca.

En conferencia de prensa, Alberto Anaya, acompañado por un grupo de diputados federales y funcionarios petistas, explicó que la definición fue tomada después de análisis y reflexión profundos sobre la situación que se vive hoy en el país y el papel que debe desempeñar el Partido del Trabajo en este contexto.

Esta decisión fue acordada por la Comisión Ejecutiva Nacional, y surgió a raíz del planteamiento que nos hizo Andrés Manuel López Obrador, a quien reconocemos como presidente legítimo y líder indiscutible de la izquierda mexicana, respecto de reconsiderar cualquier alianza o acuerdo electoral con el PRI o el PAN, destacó el coordinador de los diputados federales del PT, Pedro Vázquez.

Sin embargo, queremos aclarar que el caso de Oaxaca es especial. Primero, porque ahí se trata de enfrentar uno de los cacicazgos políticos más autoritarios y nocivos para el país. Ulises Ruiz ha sido señalado, incluso por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, como golpeador del movimiento social oaxaqueño y como responsable de la represión a decenas de activistas y dirigentes sociales en esa entidad, durante su mandato. Por eso consideramos estratégica para la democratización del país la derrota electoral del cacicazgo enraizado en Oaxaca, y contribuir a la alternancia de gobierno en ese estado, que ocupa un proceso de cambio democrático, afirmó Pedro Vázquez.

Precisó que a partir de este diagnóstico, y dado que, desde mucho tiempo atrás, habíamos comprometido nuestro apoyo a Gabino Cué como candidato al gobierno de Oaxaca, continuaremos participando en la coalición opositora que lo postula. Sobre todo, porque de no ser así Ulises Ruiz podría utilizar nuestro retiro de la alianza para atacar y obstaculizar la candidatura de Gabino Cué. No queremos servir de pretexto para allanarle el camino al cacicazgo que malgobierna Oaxaca y pretende perpetuarse en el poder, a través de su candidato Eviel Pérez, dijo.

Rechazaron que esta decisión de no aliarse con el PAN ni con el PRI en 12 de los 13 procesos electorales de este año los convierta en ariete del PRI para golpear a la alianza o para allanarle el camino a los gobiernos del tricolor; sostuvieron que responde a la convicción de que de hacerlo, estarían convalidando al bloque conservador que significan ambos partidos, los cuales, subrayaron, representan los mismos intereses de la oligarquía en el poder.

En nombre de la dirigencia petista, Pedro Vázquez destacó que ese comportamiento de panistas y priístas lo hemos constatado, una vez más, recientemente, con el acuerdo secreto firmado entre ambos partidos para repartirse el presupuesto de 2010 a cambio de aumentar impuestos y los precios de las gasolinas, electricidad, gas y diesel, que tanto han dañado a la economía de la mayoría de los mexicanos.

La Comisión Ejecutiva Nacional del Partido del Trabajo señaló que para el resto de los procesos electorales discutirá internamente si existen condiciones para conformar alianzas con el PRD y Convergencia. En los casos en que no las haya, postulará candidatos propios.