La nube de cenizas, de menor altura, se dirige a la parte habitada del territorio islandés
parciales
Unos 280 turistas británicos que visitaban Santander volvieron a su país en un buque de guerra
Viernes 23 de abril de 2010, p. 34
Madrid, 22 de abril. La mayoría de los aeropuertos europeos funcionaba este jueves con normalidad. La nube de ceniza procedente del volcán bajo el glaciar islandés Eyjafjalla no ha desaparecido, pero ya no representa un riesgo para la seguridad aérea.
El volcán islandés que el pasado jueves 15 provocó la mayor crisis aeroportuaria en la historia de Europa mantiene su actividad, si bien ahora arroja más lava que cenizas; la nube, que en el punto álgido de la crisis alcanzó 13 mil metros de altura, ahora no supera los tres mil metros. Además el viento del sudeste desvía hacia el Atlántico las cenizas y no con dirección a Europa, vía el Reino Unido, como ocurrió durante los últimos siete días.
A pesar de que este jueves los aeropuertos operaban casi con normalidad
, con unos 29 mil vuelos, varios permanecen con algunas restricciones, aunque muy parciales
, informó Eurocontrol. Se trata de algunas terminales de Gran Bretaña, Suecia, Noruega y Finlandia. Londres, además, suspendió los vuelos innecesarios de sus aviones de combate Typhoon para realizar controles de seguridad luego que se encontró ceniza volcánica en algunas de sus naves.
También se da la paradoja que el país desde donde surgió la nube de cenizas, Islandia, tuvo que cerrar por primer día su espacio aéreo, porque ahora la nube, de menor altura, se ha dirigido hacia la región habitada de su territorio.
El recuento de daños por la cancelación de unos 95 mil vuelos es todavía parcial, pero se habla de más de siete millones de pasajeros afectados.
Las cifras económicas, únicamente en el sector de la aviación, podrían superar los mil 700 millones de dólares, los aeropuertos europeos perdieron mil 260 millones de dólares, que si se suman a las pérdidas de los grupos empresariales dedicados al sector viajes, la cifra aumentaría hasta dos mil 800 millones de dólares, según un estudio elaborado por la firma española Globalia.
En el sector turístico, el mayor operador del viejo continente, TUI Travel, estimó que en los tres peores días de la crisis perdió 30.1 millones de dólares.
Si para muchos turistas la nube de cenizas significó una pesadilla, para otros fue la ocasión de vivir experiencias, como los 280 británicos que regresaron a su país desde Santander, en el norte de España, a bordo del HMS Portsmouth, un buque de guerra que regresaba de Afganistán, indicó Afp.
El único riesgo latente que temen los expertos y las autoridades es que el volcán en erupción, por su incesante actividad en el subsuelo y sus movimientos sísmicos, despierte a otro volcán situado a sólo 15 kilómetros, el Katla, el más grande de Islandia, de unos mil 500 metros, y también el más activo.