Piden constructores modificar el reglamento que estipula el seguro social obligatorio
A la primera quincena de marzo sólo se había ejercido 7.4% de recursos para infraestructura
Viernes 16 de abril de 2010, p. 24
De los 44 mil despedidos de la extinta Luz y Fuerza del Centro (LFC) hace seis meses, el presidente Felipe Calderón celebró que cientos laboran en empresas creadas por ellos mismos o en franquicias que proveen servicios a la Comisión Federal de Electricidad.
Ante las exigencias presentadas por el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), José Correa Abreu, para que el Ejecutivo impulse cambios a fondo en materia hacendaria y laboral, el michoacano también manifestó estar decidido a promover las reformas necesarias, y no sólo aquellas que sean políticamente convenientes.
En una comida con los industriales de la construcción, Calderón atestiguó y se congratuló con la firma de un convenio entre la Secretaría del Trabajo y la CMIC, que permitirá otorgar capacitación y certificación de habilidades laborales a los ex trabajadores de Luz y Fuerza, a fin de promover su contratación en la industria de la construcción.
El convenio celebrado ayer con el titular de la Secretaría del Trabajo, Javier Lozano, permitirá acreditar a los ex trabajadores electricistas que quieren emplearse responsablemente
, y entrar a un proceso de capacitación para integrarlos a la bolsa de trabajo de la cadena productiva de la construcción, expresó Correa Abreu.
El representante de los empresarios presentó al mandatario federal una larga lista de peticiones, como la de modificar el reglamento que establece el seguro social obligatorio para los trabajadores de la construcción, y se quejó de que en 2009 se acrecentó el desempleo y se frustró el tan deseado bienestar
para los mexicanos.
Calderón no dio respuesta al tema del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pero reiteró que la economía comienza a salir adelante, aunque a un ritmo mucho más lento y negativo en algunas regiones y sectores.
Insistió que el suyo es el sexenio de la infraestructura, y mencionó que en 2010 se registrará un nuevo máximo histórico de inversión por más de 630 mil millones de pesos, o sea, 50 por ciento más que la cifra de 2006, un año de alto crecimiento.
Bienestar frustrado
A pesar de que la construcción de obras es una de las principales estrategias gubernamentales para reactivar la actividad económica, hasta la primera quincena de marzo sólo se habían ejercido 7.4 por ciento de los recursos autorizados a las 16 dependencias con mayores asignaciones para el desarrollo de infraestructura, informó el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), José Eduardo Correa Abreu.
Luego de un acto en el que el presidente Felipe Calderón tomó protesta al nuevo consejo directivo del organismo para el periodo 2010-2011, el dirigente comentó que de esas 16 dependencias básicamente la mitad está trabajando y sobresale una de ellas
, mientras las otras están muy por debajo
.
El líder de los constructores llamó al gobierno federal acelerar el ejercicio en la obra pública, porque “tener los dineros guardados en el banco para ganar intereses no creo que sea la solución para que este país crezca.
¿Por qué no ha fluido el dinero? sinceramente no tengo la menor idea. El presupuesto está autorizado, el Congreso lo autorizó, ¿qué pasa? no lo sé, no tengo la respuesta
, dijo Correa Abreu.
En el discurso que pronunció ante Calderón, Correa Abreu afirmó que la crisis económica de 2009 frustró para los mexicanos el tan deseado bienestar
y representó para los constructores un periodo muy difícil, en el que se perdieron muchísimas oportunidades, se deprimió la inversión y se acrecentó el desempleo
.