Chinameca, Mor., 10 de abril. Al conmemorar el 91 aniversario de la muerte del general Emiliano Zapata, el presidente Felipe Calderón Hinojosa pidió aquí una vez más que se aprueben las reformas y transformaciones que requiere el país.

La mejor manera de honrar la memoria del Caudillo del Sur es poniendo bases nuevas y duraderas al desarrollo de México; pasar de la lógica de los cambios posibles a la de los cambios profundos y necesarios, puntualizó.

A 100 años de la Revolución, aseguró que es hora de cambiar a fondo, lo que significa no sólo hacer correcciones y ajustes, sino impulsar reformas y transformaciones que el país necesita.

Frente a representantes de los poderes Legislativo y Judicial –que por primera vez participaron en el aniversario luctuoso del caudillo–, el jefe del Ejecutivo subrayó que Zapata nunca se conformó con las pequeñas modificaciones para administrar la justicia a cuentagotas a los campesinos mexicanos, sino que buscó cambios de fondo.

A su vez, el presidente de la mesa directiva del Senado, Carlos Navarrete, resaltó que en el Congreso hay discrepancias ideológicas y políticas, debido a la pluralidad que existe, pero también hay la posibilidad de diálogo, de acuerdos y hasta de unanimidades para votar las reformas que México demanda.

Recordó que al actual periodo ordinario le quedan seis sesiones y aseguró que se ha acelerado la marcha para concluir las iniciativas que se necesitan.

El perredista añadió que los actuales son momentos difíciles, y nadie puede estar tranquilo ni satisfecho de lo que pasa en el país. Por ello, expuso que todos los actores políticos, estén en la oposición o en el gobierno, requieren unir esfuerzos para enfrentar la adversidad que se registra en varios órdenes de la vida nacional.

Calderón Hinojosa insistió, por su parte, en que los mexicanos estamos llamados a transformar las instituciones y las estructuras que heredamos del siglo XX, para construir precisamente las instituciones y estructuras del México del futuro.

Enfatizó que su gobierno ha asumido una agenda de cambios  para romper las inercias que nos atan al pasado, tras considerar positivo que el Congreso esté procesando reformas cruciales para el desarrollo democrático, económico y social de la nación, como la política, la laboral y contra los monopolios.

Frente al vicepresidente de la Cámara de Diputados, Francisco Salazar, y el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortíz Mayagoitia, así como líderes campesinos y familiares de Emiliano Zapata, informó también que su gobierno buscará entregar los certificados de derechos ejidales y agrarios a todos los núcleos de productores.

También orador en la ceremonia, el diputado Salazar Sáenz expuso, a su vez, que en México nos hemos enfocado más en el desencuentro y en las descalificaciones sistemáticas, por razones de controversias político-electorales, que en los acuerdos para la búsqueda del bien común.

Demandó, por último, hacer un alto en el camino para recordar en la memoria de Zapata que el destino de la nación se encuentra más allá de lo efímero de las coyunturas, y que es preciso tener una visión más amplia y duradera; una visión de Estado como guía del quehacer cotidiano que ayude a construir un mejor país.