Domingo 21 de marzo de 2010, p. 25
Londres. Nuevas evidencias se dieron a conocer ayer de que la inteligencia militar británica realizó una operación secreta para maltratar a prisioneros iraquíes. Documentos revelaron que los cautivos fueron encapuchados durante varias horas bajo un intenso calor y privados del sueño por oficiales de defensa. Esta información surge en momentos en que se realiza una investigación por el asesinato del prisionero iraquí Baha Mousa, quien fue golpeado hasta la muerte mientras estaba bajo custodia de las tropas británicas durante septiembre de 2003.