Nadie reivindica las acciones; Al Qaeda amenazó el mes pasado con sabotear los comicios
Chiítas en alianza con kurdos dominarán el Congreso; los sunitas seguirán marginados: analistas
Viernes 5 de marzo de 2010, p. 28
Bagdad, 4 de marzo. El primer día de votación para las elecciones legislativas iraquíes se vio ensangrentado hoy por tres atentados que causaron la muerte a 14 personas, pese a las rígidas medidas de seguridad impuestas en este país, donde este año se espera el retiro de la mayoría de las tropas estadunidenses.
Los tres atentados, que ocurrieron con pocas horas de intervalo cerca de centros de votación en Bagdad, no fueron reivindicados, aunque en días anteriores la red Al Qaeda y la agrupación Ansar Sunna, musulmanes sunitas que han resistido la ocupación estadunidense desde 2003, amenazaron con sabotear los comicios.
Hemos decidido impedir estas elecciones por todos los medios posibles, principalmente militares
, advirtió el jefe de Al Qaeda en Irak, Abu Omar Baghdadi, en un mensaje grabado el 12 de febrero.
Para estos tres días de comicios se registraron 18.9 millones de electores, pero hoy empezaron a sufragar 97 mil personas que están hospitalizadas o presas y 850 mil militares y policías. Este viernes estarán habilitados para votar un millón 400 mil iraquíes residentes en el extranjero.
Siete soldados murieron en dos atentados perpetrados por suicidas contra militares que hacían cola para votar en dos escuelas habilitadas como locales electorales de Bagdad, informó el Ministerio del Interior.
Tres uniformados murieron y 15 resultaron heridos en un primer ataque en el barrio de Mansur, al oeste de Bagdad. En el otro, perpetrado en el barrio Bab Mazam, en el centro de la capital,fallecieron cuatro soldados y diez resusltaron heridos.
Horas antes estalló una bomba en un edificio de viviendas ubicado a 500 metros de una escuela que el domingo debe servir de oficina electoral en el norte de Bagdad, acción en la que murieron siete personas, entre ellas cuatro niños.
Los ataques de los opositores contra el proceso electoral comenzaron el miércoles, cuando un triple atentado causó 33 muertos y 55 heridos en Baquba, capital de la provincia de Diyala, norte de Irak.
Las acciones fueron ejecutadas a pesar de la movilización de 200 mil uniformados gubernamentales en todos el país, que por primera vez desde la ocupación de Irak carecen del apoyo de los contingentes estadunidenses.
Según el calendario anunciado por el presidente Barack Obama, la mayor parte del contingente, que actualmente cuenta con unos 96 mil uniformados, saldrá del país en agosto de 2010 y la totalidad a finales de 2011.
Un total de seis mil 172 candidatos se disputan los puestos del Parlamento unicamaral, actualmente dominado por partidos de la mayoría musulmana chiíta.
Analistas políticos locales calculan que fuerzas afines a este sector de la población conservarán el poder –en alianza con la minoría étnica kurda, que también profesa el chiísmo–, mientras que los sunitas, que dominaron la escena política durante el periodo de gobierno de Saddam Hussein, seguirán marginados en el Legislativo, en parte porque se les vincula con el partido Baaz, que estuvo en el poder.