Diputados y dirigentes del PRD y PAN se enfrascaron ayer en un debate respecto a la iniciativa de Ley de Seguridad Pública del Distrito Federal que envió el presidente Felipe Calderón a la Cámara de Diputados. Mientras los primeros la criticaron ácremente, los segundos la defendieron bajo el argumento de que ese tema es de atribución federal.

Respecto a los perredistas, el diputado federal Agustín Guerrero calificó esa propuesta de retrógrada e injerencista, que busca que las cosas sean como en la época de la regencia, cuando el Presidente de la República en turno ponía y quitaba sin atender los intereses de los capitalinos.

En conferencia de prensa, emplazó a Calderón a un debate legislativo para que explique las razones de su iniciativa y por qué no tomó en cuenta al jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard.

Guerrero detalló que esa iniciativa va en contra de la lógica de profundizar la democracia en la ciudad de México, porque propone atribuciones que ya no tenía el Ejecutivo, y conculca a los capitalinos el derecho de legislar en materia de seguridad pública.

Comentó que Calderón no tiene autoridad en esa materia, pues después de 18 mil muertos que ha dejado su estrategia contra la delincuencia, es muy difícil decir que tiene buenos resultados.

Su correligionaria Estela Damián dijo que se necesita un debate serio en esta materia. La ciudad sí requiere modificaciones, pero una fundamental: la personalidad total para legislar en la ALDF, apuntó.

El líder del PRD-DF, Manuel Oropeza, aclaró que no se discuten las facultades legales que tiene la Presidencia para presentar iniciativas, sino el tema de fondo, que es la imposición y la falta de consulta del gobierno federal hacia la administración encabezada por Marcelo Ebrard.

En contraste, los diputados locales del PAN Carlos Flores y Guillermo Huerta rechazaron que dicha iniciativa atente contra la autonomía del DF, pues lo único que se busca es la coordinación en materia de seguridad entre los tres niveles del gobierno, en la que se incluye a la capital, y plantearon que el jefe de Gobierno capitalino acuda al Congreso de la Unión y manifieste su posición al respecto, para abrir el debate y construir la policía que se requiere para esta ciudad.

A ellos se sumó el dirigente del PAN-DF, Obdulio Ávila, quien remarcó que la seguridad pública en esta ciudad es facultad del gobierno federal, y constituye un tema sensible ante el cual, más que declaraciones políticas, lo que urge es una reforma política para el DF.

Respecto a las críticas que ha recibido la propuesta calderonista, opinó que son declaraciones políticas sin sustento legal.