Ciudad Juárez, Chih., 21 de febrero. Miembros del cabildo de El Paso, Texas, pidieron al presidente Barack Obama convertir a Ciudad Juárez en prioridad política e impulsar incluso una regulación de la mariguana desde el gobierno estadunidense, a fin de contrarrestar los acontecimientos que trastocan la coexistencia fronteriza.

Las claras condiciones de inseguridad que privan en la ciudad hermana deben revisarse de manera conjunta, porque su impacto negativo también se deja sentir en El Paso, indicaron los regidores Beto O’Rourke y Steve Ortega.

Ambos representantes pidieron a Obama que su prioridad sea Ciudad Juárez en vez de Irak y Afganistán, pues los compradores del lado mexicano, en su mayoría juarenses, generan ingresos por 2 mil millones de dólares anuales y más de 60 mil empleos en El Paso.

Empero –dijeron– tal volumen de negocios está en riesgo porque la escalada de asesinatos y delitos violentos del lado mexicano ya costó la vida de casi 150 menores, dañó al menos 10 mil empresas y comercios, orilló a la desocupación de 100 mil viviendas y puso en fuga a 100 mil juarenses, 30 por ciento de los cuales ingresaron a Estados Unidos y ya son residentes de El Paso.