Torreón, Coah., 21 de febrero. En partido de goles, volteretas y gran dinámica, Santos y Estudiantes empataron 3-3, con dos anotaciones del argentino Daniel Ludueña, quien estuvo cerca de marcar su tercer tanto en soleada tarde.

El resultado significó un tanque de oxígeno para el timonel del cuadro de Zapopan, Miguel Herrera, quien llegó a la cita con la sombra de la guillotina a sus espaldas.

Desde el comienzo el cotejo resultó con mucha movilidad y al primer minuto Rodrigo Pony Ruiz armó el avance para servir a Rubens Sambueza, quien definió con disparo directo a las manos del portero local Oswaldo Sánchez.

Los Guerreros replicaron de inmediato con avances peligrosos, pero el tablero no se movió hasta el minuto 13, cuando Carlos Darwin Quintero robó el esférico en el medio campo y dio pase a Daniel Hachita Ludueña; éste hizo un recorte en el área para sacudirse la marca enemiga y definió con buen tiro cruzado que anidó en las redes.

El mismo Ludueña tuvo dos oportunidades más que no prosperaron, hasta que Pony Ruiz, todavía con gran fuelle pese a sus 15 años de trayectoria, disparó contra el arco de Oswaldo; el tiro pegó en el travesaño y luego el guardameta rechazó un segundo intento, hasta que en el rebote Élgabry Rangel aplicó una especie de tijera que venció al arquero santista, para imponer el 1-1.

El conjunto de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG) se mantuvo al acecho, mientras los de casa luchaban por reponerse del asalto. Rafael Medina envió un centro que pegó en el talón de un defensa, la pelota le quedó a modo a un atento Mauro Cejas, quien reaccionó bien y con tiro cruzado dio la vuelta al marcador.

En el complemento el ritmo subió de tono, porque los embalados Guerreros no estaban dispuestos a regalar puntos en su casa, mientras los desesperados Estudiantes luchaban por salir de entre los coleros y respaldar con resultados a su estratega, el Piojo Herrera.

Pony Ruiz y Rubens Sambueza generaron un buen avance contra la meta de Oswaldo Sánchez, quien debió aplicarse con lance a la izquierda para desviar el balón que llevaba firma de gol.

Los de la UAG aumentaron su ventaja al 55: en un tiro de esquina desde la izquierda, el defensa Juan Carlos Leaño aprovechó su gran estatura para pegar un salto, superar a los defensas y rematar picado. La pelota se le escurrió a Oswaldo y se concretó el 3-1.

La reacción de los pupilos de Rubén Omar Romano fue instantánea: acosaron la meta de Mario Rodríguez hasta que el atrabancado Leaño cometió falta y el silbante Julio David Escobar decretó la pena máxima. Al cobro fue Juan Pablo Rodríguez, quien definió a la izquierda del guardameta para el 3-2.

El público que hizo una buena entrada en el Nuevo Estadio Corona respondió con gran apoyo para los suyos y se excedió en insultos hacia los visitantes. No les costó mucho trabajo provocar al controvertido Miguel Herrera, quien se enganchó y recibió un regaño arbitral por responder a la gente.

Ahora Estudiantes era el desconcertado, mientras Santos se volcó en pos del empate. Ludueña comandó las acciones al frente y al minuto 69 hizo un recorrido por la derecha, dio pase retrasado para Carlos Morales, quien prendió el esférico de aire, el balón hizo un bote que desequilibró al portero Rodríguez y no le permitió atajar.

Con el 3-3 en el marcador, los Guerreros lucharon por la victoria; Ludueña mandó un obús que Mario Rodríguez logró desviar a la izquierda. Los de la UAG respondieron a través de Rodrigo Ruiz, quien estrelló su remate en el travesaño.

El popular Pony, quien ha manifestado su anhelo de colgar los botines con la playera albiverde, salió de cambio entre aplausos, a pesar de haber jugado hoy con el equipo rival.