Arturo García Bustos y Arturo Estrada disertaron sobre los artistas
la pintura con sentido sociallegada por Frida y Diego
Sábado 20 de febrero de 2010, p. 6
¿Cómo y en qué momento fue que Frida Kahlo alcanzó reconocimiento y fama mundial, incluso por momentos superior a la de su pareja Diego Rivera?
Esa es una incógnita que no ha sido descifrada del todo por los pintores Arturo García Bustos y Arturo Estrada, alumnos y amigos de la pintora, según reconocen.
De lo que sí están convencidos es que resulta fundamental que la pintura con sentido social que Diego y Frida nos dejaron se siga desarrollando
.
Como parte de las actividades paralelas a la exposición fotográfica Diego y Frida: una sonrisa a mitad del camino, que se presenta en el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, García Bustos y Estrada disertaron la noche del jueves en torno al dúo de artistas.
García Bustos definió a Frida como héroe, no por sus capacidades físicas, sino por la grandeza de su corazón
y aseguró que en contraste con la idea tan difundida de que ella daba una imagen de dolor por la enfermedad que la agobió, siempre reflejó optimismo, alegría, vida.
Aun en los momentos más dramáticos, siempre satirizaba y se burlaba del dolor y la muerte; aunque teniéndola presente, siempre llenó su vida con alegría, con color, creó poesía y belleza no sólo en sus cuadros, sino en todo el ambiente que la envolvía
, argumentó.
García Bustos contó que él fue quien colocó la bandera del Partido Comunista Mexicana sobre el féretro de Frida, cuando ésta era velada en Bellas Artes. La manera de enseñar de la artista a sus alumnos, dijo, estaba regida por la libertad, en contraste con los métodos que se aplicaban en las escuelas académicas.
La libertad de las formas nos la enseñó en las figurillas de Mezcala y en todo el arte prehispánico, ni en Picasso ni en Henry Moore; era un momento de profunda afirmación del nacionalismo, en los ámbitos político y cultural
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La participación de Arturo Estrada, El Güero, versó más sobre Rivera, a quien atribuyó haber recuperado un concepto que había perdido la pintura en aquel entonces: la función social.
Diego pintó a su pueblo en imagen realista y precisa
, sostuvo. Todo lo que se ha dicho de su obra muralística puede aplicarse a su pintura, en temple, acuarela y dibujo, producción que bastaría para consagrarlo entre los grandes maestros del arte universal contemporáneo
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