Analizan en Casa Lamm fracaso de la cumbre en Copenhague
Miércoles 17 de febrero de 2010, p. 41
Las negociaciones internacionales sobre el cambio climático únicamente se centran en adoptar mecanismos de mercado para el control de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), con el fin de mantener el modelo de producción capitalista, advirtieron analistas durante una evaluación de la pasada reunión de Naciones Unidas en Copenhague.
En el foro El rotundo fracaso de la conferencia de Naciones Unidas en Copenhague, organizado por La Jornada y Casa Lamm, el periodista Matteo Dean, quien en diciembre pasado acudió a dicho encuentro, recordó que participaron 194 países y no lograron obtener un acuerdo, una vez que el Protocolo de Kyoto vence en 2012 y las naciones buscan establecer un segundo periodo de compromiso de reducción de GEI.
Destacó que la Unión Europea salió del mapa en las negociaciones finales –de las que se obtuvo un acuerdo voluntario–, en las que sí estuvieron países como China, Brasil y Sudáfrica. Se esperaba que ahí se rompiera el poder de los grandes, pero se formó un nuevo bloque.
La expectativa era lograr metas realistas de reducción de emisiones, que debían ser de entre 50 y 75 por ciento, pero no ocurrió, por lo que la reunión se consideró un fracaso, dijo por su parte Francisco Aguayo, de El Colegio de México.
La respuesta de los poderosos para afrontar el cambio climático son mecanismos de mercado. Las medidas para combatirlo están basadas en mercados de carbono y el Mecanismo de Desarrollo Limpio. Son respuestas a la medida del capital
, precisó. La falta de acuerdo es algo benéfico, pues da más tiempo para pensar y es mejor que un mal acuerdo, agregó.
A su vez, Silvia Ribeiro, colaboradora de La Jornada, destacó que la agricultura y la ganadería industrial generan alrededor de 50 por ciento de las emisiones de GEI, específicamente de metano. Además, las granjas de cerdos cubren al menos 50 por ciento de los proyectos del Mecanismo de Desarrollo Limpio; contaminan y a la vez reciben dinero.
Para la 16 Conferencia de las Partes, que se celebrará en Cancún a finales de noviembre, las corporaciones intentarán impulsar su agenda y los acuerdos que se buscará establecer se basarán en el mercado; tenemos que parar esto
, advirtió Alberto Gómez, de Vía Campesina.
Tras relatar las movilizaciones sociales que se dieron en Copenhague, dijo que el desafío es construir y fortalecer un posicionamiento político en torno a la justicia climática. En Cancún quizá no se verá la respuesta que se espera, pero habrá más participación de la sociedad
.
Finalmente, el boliviano Pablo Mancilla explicó que los GEI son un efecto y no una causa del modelo de producción del sistema capitalista. Detalló el proceso que se lleva para la realización en ese país de la Conferencia mundial de los pueblos sobre cambio climático y los derechos de la madre tierra, a realizarse del 19 al 22 de abril en Cochabamba.