El narcotráfico ha buscado ocupar los espacios que abandonó el Estado en el campo y actualmente las siembras ilícitas conviven con alrededor de 30 por ciento de los cultivos, señaló el presidente magistrado del Tribunal Superior Agrario (TSA), Ricardo García Villalobos, quien dijo que las bandas del crimen también impiden que las resoluciones agrarias se cumplan con prontitud.

En el seminario Seguridad jurídica en la inversión, compra y participación en tierras ejidales y su ordenamiento en materia ambiental, organizado por la Barra Mexicana Colegio de Abogados, el magistrado, en su exposición, se refirió a que el narcotráfico ha impedido que se acelere el cumplimiento de algunas resoluciones jurídicas.

El 30 por ciento de los cultivos son mixtos, tienen droga junto con un cultivo lícito, indicó. El narcotráfico es un problema de seguridad en el campo y ya tiene muchos años. Se dejó crecer por la corrupción y ahora ha querido tomar esos espacios que dejó el Estado, agregó.

Rechazó que haya rezago en juicios agrarios, ya que de 550 mil asuntos revisados sólo queda pendiente 6.77 por ciento de los expedientes, y ello, dijo, gracias a la eficiencia de los juicios orales.

El Estado le ha fallado al campo al no entenderlo como asunto de seguridad nacional. Si no entendemos que la autosuficiencia alimentaria es la producción suficiente de alimentos y no su actual disposición en anaqueles, cuando los exportadores nos corten el suministro nos pondrán prácticamente de rodillas.

Recordó que la desarticulación del campo empezó a finales de los años 70, cuando desaparecieron sistemáticamente instituciones como Conasupo. Los programas del campo fueron en retroceso cuando pasamos del derecho social al derecho económico y a la sustitución de los deberes del Estado contribuyeron banqueros, líderes y gobiernos, dejando al campo en el desamparo.

Como ejemplo del abandono al agro se refirió al municipio de Angangueo, Michoacán. La corrupción permitió el deterioro ambiental y el incumplimiento de la ley; es lo que está detrás de la tragedia que hoy viven los pobladores de ese sitio.

Demandó abrir la discusión rumbo a una reforma de carácter agrario para reimpulsar el desarrollo agrario, pues para nadie es secreto que el minifundio sólo reparte pobreza.