Llevar a cabo un concierto en un sitio (arqueológico), no quiere decir que se esté comercializando el patrimonio, opinó Alfonso de Maria y Campos, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Durante la presentación del programa general de trabajo de dicho organismo para 2010, el funcionario explicó sobre la autorización de conciertos y espectáculos en zonas arqueológicas que “dentro del INAH hay opiniones divergentes. La prioridad del instituto –subrayó– es proteger y conservar, pero también hay responsabilidad del pacto federal de permitir que se realicen. Nosotros no tenemos la última palabra en esa cuestión, aunque sí en lo que toca a conservación y protección; ahí sí la decimos”.

Dentro del INAH “hay una fuerte corriente que no acepta los conciertos, pero no por razones de protección, sino de comercialización; y no veo –manifestó De Maria y Campos– que se esté comercializando el patrimonio”.

Plan de Manejo para Teotihuacán

Respecto del Plan de Manejo para el sitio prehispánico de Teotihuacán, ya está enviado para su obligatoria ejecución, adelantó De Maria, del cual destacó, entre sus prioridades, conocer bien el crecimiento de la población en esa zona, como un requisito de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, pues este organismo internacional desde hace cinco años ha pedido al INAH que trate de evitar el crecimiento urbano.

En cuanto a las adquisiciones de terrenos por el instituto, indicó que están en proceso de comprar varios en Teotihuacán y Chacaltzingo.

Para este 2010, la coyuntura de las celebraciones del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución, así como la crisis económica, han determinado la agenda de trabajo del INAH.

De Maria y Campos reconoció que se tuvieron que renovar los museos del país dependientes del INAH, pues se encontraban rezagados en la forma en que presentaban y divulgaban su acervo, en los servicios que ofrecían y, sobre todo, en el aspecto tecnológico y de seguridad.

Asimismo, se continuará con la aplicación del Programa de Empleo Temporal (PET), con un presupuesto de 100 millones de pesos.

La Secretaría de Desarrollo Social contratará temporalmente para el INAH a 13 mil personas, con los que se desarrollarán 293 proyectos de mantenimiento menor en zonas arqueológicas y museos.

Por otra parte, con una inversión de 12.5 millones de pesos destinados a su restauración, en septiembre se realizará la reapertura de los museos históricos que conforman la llamada Ruta del Bicentenario de la Independencia: Museo Casa de Hidalgo La Francia Chiquita, Casa de Hidalgo, Ex Curato de Dolores y Museo Regional de Guanajuato Alhóndiga de Granaditas, así como el Museo Regional Michoacano.

Mientras que para la reapertura del Museo Nacional de las Culturas, se invirtieron cerca de 21 millones de pesos.

En materia de arqueología, durante 2010 se abrirán tres nuevos sitios: Cañada de la Virgen, en Guanajuato; Tancama, en Querétaro, y Bocana del Río Copalita, en Oaxaca, cuya inversión para su habilitación fue de 30 millones de pesos.

Y en lo que respecta a trabajos de conservación y restauración del patrimonio cultural, en 2010 el INAH invertirá alrededor de 20 millones de pesos, en la ejecución de diversos proyectos.

Traerán la muestra Moctezuma II

Por otra parte, más de una docena de exposiciones nacionales e internacionales se llevarán a cabo durante el año.

Destaca la titulada Moctezuma II, que se presentó en el Museo Británico de Londres, donde registro una afluencia de 210 mil visitantes. La misma muestra se exhibirá en el Museo del Templo Mayor, con la diferencia de que se integrará la pieza de la diosa Tlaltecuhtli, única figura azteca con el color original, descubierta recientemente en el predio de Las Ajaracas.

Otra exposición es La Revolución Mexicana en fotografías: música, testimonios y documentos, la cual se presentará en más de 30 recintos del país.

El Instituto Nacional de Antropología e Historia tendrá para 2010 un presupuesto de alrededor de 3 mil millones de pesos, de los cuales 75 por ciento está destinado a salarios e investigación y el 25 por ciento restante a proyectos específicos.