Desde finales de 2008 se empezó a observar una disminución en el número de migrantes que intentan cruzar hacia Estados Unidos, sobre todo por el endurecimiento de las políticas en la materia, la recesión económica y las crecientes tasas de desempleo en ese país, aseguró Eduardo Mendoza Cota, investigador del Colegio de la Frontera Norte (Colef).

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, en el tercero y cuarto trimestre de 2008 se documentó una caída de 28.5 y 18.2 por ciento, respectivamente, en la cifra. Con la crisis económica en Estados Unidos, el saldo migratorio ha empezado a ser negativo. Además, el fenómeno está dejando de ser la válvula de escape, que durante muchos años sirvió para mitigar la incapacidad de nuestra economía para generar empleos.

Al participar en el seminario El TLCAN: crecimiento, inversión extranjera directa, desigualdad y migración, Mendoza Cota estimó que la tasa de retorno de los connacionales, junto con la difícil situación económica en México, dibuja un panorama en el país cada vez más complicado.

Dijo que desde 1985 se observa un creciente endurecimiento de las políticas antimigrantes en Estados Unidos. De ese año a 2002, por ejemplo, los recursos para la Patrulla Fronteriza aumentaron más de 300 por ciento, mientras el número de connacionales repatriados creció 806 por ciento entre 1985 y 2003.

En el seminario, realizado en la Casa del Colef, el investigador destacó que lo anterior se ha agravado por la crisis económica estadunidense y la creciente tasa de desempleo, que en el último trimestre de 2009 llegó a 10.31 por ciento. Esa cifra, apuntó, casi se duplica cuando se refiere a las minorías, como los hispanos.

Comentó que, según datos oficiales, los sectores más afectados por la recesión y el desempleo son precisamente en los que se desempeñaban muchos migrantes: construcción, manufactura, transporte y campo. Además, enfatizó que diversos analistas hablan de una crisis de largo plazo, en la cual puede darse el fenómeno de crecimiento económico pero sin generación importante de empleo.

En la primera mesa del seminario, los investigadores Gerardo Esquivel y Cuauhtémoc Calderón, del Colef, y Gerardo Ángeles, del IPN, abordaron el tema del TLCAN y la desigualdad. Con matices, explicaron que la apertura económica sirvió en un primer momento para lograr crecimiento económico, el cual permitió disminuir las desigualdades de ingreso.