Pese a los daños a la salud y el incremento de la mortalidad por el uso en vehículos de combustibles con alto contenido de azufre, la Norma 086, que obligaba a Petróleos Mexicanos (Pemex) a introducir gasolina y diesel de ultra bajo azufre (UBA) en todo el país en 2009, está sujeta a modificación por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la paraestatal quiere cumplir esa regulación hasta 2015.

Tania Mijares, del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), destacó que si bien dicha norma tiene que modificarse porque los calendarios establecidos para la introducción de combustibles más limpios ya quedaron rebasados –debió haber entrado en vigor en todo el país en octubre de 2009–, Pemex ahora pretende aplazar la fecha al menos cinco años, y nada garantiza que vaya a cumplir.

Dada la importancia de la calidad de las gasolinas para reducir las emisiones de contaminantes, el 30 de enero de 2006 la Semarnat, en conjunto con las secretarías de Energía y de Economía, publicó la Norma 086, la cual establece nuevas especificaciones para los combustibles que se venden en México, principalmente en contenido de azufre, olefinas y benceno, entre otros, indica el Instituto Nacional de Ecología en una evaluación socioeconómica sobre el tema.

Agrega que la flota vehicular en el país prácticamente se duplicará en los próximos 15 años, lo cual provocará un incremento de los contaminantes por ese sector, con el consecuente deterioro de la calidad del aire. No obstante, la introducción y comercialización de combustibles con UBA permitirá que tecnologías vehiculares modernas y avanzadas, disponibles en Estados Unidos y Europa, funcionen adecuadamente, logrando así reducciones significativas de las emisiones en México.

Sin embargo, con el atraso en la entrada de combustibles de UBA también se aplaza la introducción de mejores tecnologías para vehículos, agregó Mijares. Recordó que Pemex, a pesar de haber suscrito el compromiso de la norma y haber firmado las minutas, se amparó contra la regulación con el argumento de que la Semarnat y la Sener no tienen competencia en materia de combustibles.

La Norma 086 se estableció  porque las dependencias consideraron que con ello se reducirían las emisiones de partículas suspendidas, óxido de nitrógeno y bióxido de azufre, lo cual traería como consecuencia mejor calidad del aire y se evitarían aproximadamente 56 mil muertes prematuras, 166 mil casos de bronquitis crónica, 5.6 millones de días de trabajo perdidos y 78.4 millones de jornadas de actividad restringida por enfermedades respiratorias en el periodo 2009-2030.

En los últimos años se ha descubierto que, pese a que han bajado las concentraciones de ozono y PM 10 (partículas suspendidas) en la zona metropolitana de la ciudad de México (ZMCM) y otras grandes urbes, aún no están dentro de las normas. Esto sigue generando exceso de muertes y enfermedades. Vemos que tendríamos que continuar bajando esas concentraciones, porque hay alrededor de mil decesos al año en la ZMCM que pueden ser atribuibles a la contaminación atmosférica, enfatizó por su parte Horacio Riojas, del Instituto Nacional de Salud Pública.

Agregó que el cumplimiento de las disposiciones y la reducción de las concentraciones trae beneficios a la salud en todas las grandes ciudades que tienen problemas de contaminación como Monterrey, donde existen conflictos de exposición a partículas respirables, y en otras más chicas, como Ciudad Juárez y Salamanca, donde hay exposición al bióxido de azufre. La calidad del aire es mala para sectores más susceptibles, como niños y mayores de 65 años.